Canberra, 19 may (Prensa Latina) Un estudio realizado por investigadores del Instituto George, en Australia, advirtió que aunque hoy se desconocen tratamientos eficaces para la demencia, el control de la hipertensión arterial podría prevenir futuros casos de la enfermedad.
«Nuestros resultados sugieren que un enfoque más adaptado al tratamiento de la hipertensión arterial podría ser más eficaz para prevenir la demencia», indica la autora principal del estudio, Jessica Gong.
De acuerdo con la investigación, tanto la presión arterial baja como la alta se asociaban a una mayor probabilidad de padecer demencia en los hombres, pero en el caso de las mujeres el riesgo aumentaba a medida que subía la presión arterial.
Descubrieron que el tabaquismo, la diabetes, los niveles elevados de grasa corporal, el haber sufrido un accidente cerebrovascular previo y el bajo nivel socioeconómico estaban asociados a un mayor riesgo de demencia en ambos sexos, de manera similar; sin embargo, no pasa así con la presión arterial.
Según explican, se debe a las diferencias biológicas entre mujeres y hombres; pero también al tratamiento médico de la hipertensión, pues es menos probable que ellas tomen la medicación prescrita por el especialista, y suelen tomar más medicinas y experimentar mayores efectos secundarios.
Para este estudio se utilizó una base de datos biomédica de Reino Unido, que reclutó a 502 mil 489 nacionales de entre 40 y 69 años (libres de demencia al inicio del estudio) entre 2006 y 2010.
Especialistas alertan que la demencia se está convirtiendo rápidamente en una epidemia mundial y afecta a unas 50 millones de personas.
Se prevé que esta cifra se triplique antes de 2050, debido principalmente al envejecimiento poblacional.