Buenos Aires, 22 may (Prensa Latina) Fuertes controles, sobre todo en el acceso a esta capital, se sintieron hoy en la primera jornada de un nuevo confinamiento que regirá hasta el 30 de mayo en Argentina para disminuir los contagios de Covid-19.
En declaraciones a la emisora Radio 10, la ministra de Salud, Carla Vizzotti, aseguró que la medida adoptada por el gobierno nacional es transitoria y se volverá a evaluar la situación después de este tiempo y, en caso de ser necesario, generar medidas intermitentes.
El transporte público casi vacío, pocos pasajeros en las cabeceras de trenes metropolitanos y menos movimiento en las calles, se apreciaron hoy en medio del aislamiento estricto que vino aparejado por un ciclón extratropical que se posó sobre el país, entre ellos esta capital, con lluvias intensas.
Las imágenes de hoy, con la popular avenida 9 de julio casi desierta, remiten a marzo del pasado año cuando se dictaba por primera vez la cuarentena tras la llegada de la pandemia, con Buenos Aires convertida en una ciudad fantasma.
El secretario de Seguridad de la Nación, Eduardo Villalba, anunció este sábado que quienes no tengan el certificado que los habilite para circular a raíz de las nuevas disposiciones para evitar la propagación del virus, serán detenidos en los controles realizados por las fuerzas de seguridad.
Por su parte, el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, manifestó que desde el Gobierno esperan extremar los controles para bajar la circulación de personas.
Desde hoy quedaron suspendidas las actividades sociales, económicas, educativas, religiosas y deportivas en forma presencial, solo funcionarán los comercios esenciales y se puede circular en lugares cercanos al domicilio entre las seis de la mañana y las 18:00 hora local.
Después de los nueve días, hasta el 11 de junio, se retomarán las actividades en el marco de las medidas vigentes y se implementarán las restricciones que correspondan a cada zona según los indicadores epidemiológicos y sanitarios.
Las nuevas decisiones se tomaron el jueves último en una semana que fue la peor hasta el momento desde el inicio de la pandemia, con un promedio de 35 mil casos diarios y altas cifras de fallecidos, con 695 en menos de 24 horas reportados la víspera.