Washington, 14 jul (Prensa Latina) La estrategia de Estados Unidos fracasó en su objetivo de cambio de régimen en Cuba durante décadas y es poco probable que tenga éxito ahora, advirtió hoy un artículo publicado en el sitio digital Commondreams.
Bajo el título La mano oculta del bloqueo estadounidense desata las protestas en Cuba, el material afirma que la brutal guerra económica emprendida contra la nación insular durante más de 60 años explica la causa de los hechos recientes.
En 1960 el entonces subsecretario de Estado Lester Mallory llamó explícitamente a «negar dinero y suministros a Cuba, para disminuir los salarios monetarios y reales, para provocar hambre, desesperación y el derrocamiento del gobierno», recuerda el artículo, firmado por Medea Benjamin, cofundadora de la organización pacifista Code Pink, y Leonardo Flores, experto en política latinoamericana.
Argumenta que los disturbios vieron su magnitud exagerada por la prensa occidental y por los cubanoamericanos que llevan 60 años prediciendo la inminente caída del gobierno cubano.
Medios de comunicación como The New York Times escribieron sobre «cientos de cubanos» mientras que Reuters los describió como miles, en cualquier caso, Cuba tiene una población de 11 millones de personas, apunta el texto.
Las protestas -enfatiza- palidecen en comparación con las movilizaciones masivas (reprimidas en muchos casos violentamente) que han sacudido Colombia, Haití, Chile, Ecuador y otros países latinoamericanos en los últimos años, o incluso Portland, Oregón, o Ferguson, Missouri, en Estados Unidos.
Sin embargo, los medios de comunicación estadounidenses han prestado poca atención a los contramanifestantes que salieron a la calle para expresar su apoyo al gobierno y a la Revolución cubana, destaca.
Esto incluye al presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, quien marchó por las calles de La Habana tras denunciar las protestas como un intento de «fracturar la unidad del pueblo», añade.
Benjamin y Flores saludaron que Cuba salva a su pueblo frente a un escenario de asfixia, en particular las políticas sanitarias para proteger a la población de lo peor de la pandemia de Covid-19.
Cuba -resaltaron- ya ha demostrado que dos de las cinco vacunas contra la Covid-19 que está desarrollando tienen éxito en la prevención de las infecciones por el coronavirus que provoca la enfermedad y ha inmunizado a más de dos millones de personas con sus vacunas producidas localmente.
Para ambos articulistas no pasó por alto que la guerra económica de Estados Unidos contra Cuba siempre la acompañaron otras estrategias para derrocar al gobierno en la isla.
Estas incluyen -recalcaron- tentativas de asesinato, apoyo a terroristas (como Luis Posada Carriles, que voló un avión cubano en 1976, matando a 73 personas), un intento de invasión y millones de dólares gastados en poder «blando».