Washington, 31 ago (Prensa Latina) El Departamento de Salud de Luisiana, en el sur de Estados Unidos, confirmó hoy el fallecimiento de una segunda persona debido al impacto del huracán Ida en ese territorio, donde se reportan daños catastróficos.
El gobernador del estado, John Bel Edwards, advirtió que el número de muertos aumentará «considerablemente» mientras realizan las labores de búsqueda y rescate.
Ida, que actualmente es una depresión tropical, tocó tierra en Luisiana el domingo como huracán de categoría 4 en la escala Saffir-Simpson y 24 horas después más de un millón de habitantes siguen sin electricidad, principalmente en la ciudad de Nueva Orleans.
Las líneas eléctricas, los árboles y las inundaciones obstaculizan el trabajo de los cinco mil 200 miembros de la Guardia Nacional enviados para realizar labores de recuperación y principalmente para salvar vidas.
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, anunció que funcionarios de la administración viajarán a Louisiana y Mississippi esta semana para reunirse con los líderes estatales y estudiar los daños.
El presidente estadounidense, Joe Biden, declaró la situación de desastre para Luisiana y Misisipi, con lo cual facilita el envío de ayuda federal.
El mandatario sostuvo más temprano una reunión virtual con los gobernadores de las zonas afectadas a quienes dijo estar dispuesto a apoyar en lo necesario.
Previo a la llegada de la tormenta decenas de miles de personas en Nueva Orleans y las zonas costeras de Luisiana decidieron evacuar rumbo norte ante el temor de que se repitiera la tragedia de hace 16 años, cuando el huracán Katrina cobró la vida de dos mil personas.
En esta ocasión, según los presentes, los daños son cuantiosos, pero menores a los de aquella vez, aunque los vientos de Ida fueron tan poderosos que revirtieron el flujo del río Mississippi.