Copenhague, 23 nov (Prensa Latina) El director de la oficina regional de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para Europa, Hans Henri P. Kluge, calificó hoy de muy grave la situación de Covid-19 en el continente.
Nos enfrentamos a un invierno difícil, pero gobiernos, autoridades sanitarias e individuos podemos tomar medidas decisivas para estabilizar la pandemia, advirtió el funcionario, quien estimó en 700 mil las muertes antes de marzo próximo de no actuar en consecuencia.
Podríamos superar los 2,2 millones de fallecidos hasta la primavera por el coronavirus SARS-CoV-2, causante de la enfermedad, si continúa la tendencia actual de aumento de casos, aseveró el doctor en un comunicado.
Las víctimas registradas la semana pasada subieron hasta cerca de cuatro mil 200 al día, lo cual duplicó las dos mil 100 de finales de septiembre, y en total sobrepasaron la marca de 1,5 millones en los 53 países de la región, acotó la entidad.
La OMS proyectó una tensión «alta o extrema» en las camas de los hospitales en 25 naciones, y una «alta o extrema» en las unidades de cuidados intensivos (UCI) en 49 de aquí al tercer mes de 2022.
Para poder vivir con este coronavirus y continuar con nuestra vida cotidiana, debemos adoptar un enfoque más allá de la vacuna, consideró Kluge. Esto significa -explicó- recibir las dosis estándar del inmunizante antiCovid-19, tomar un refuerzo si se ofrece, así como incorporar medidas preventivas en las rutinas normales.
Todos tenemos la oportunidad y la responsabilidad de ayudar a evitar una tragedia y pérdida de vidas innecesarias, y de limitar los trastornos de la sociedad y las empresas durante esta temporada de invierno, aseveró el director regional de la OMS para Europa.
Datos del organismo sanitario internacional de Naciones Unidas dan cuenta que Europa administró más de mil millones de dosis contra la enfermedad y el 53,5 por ciento de las personas completaron su pauta de vacunación.
Esto, sin embargo, oculta grandes brechas entre los Estados y resulta esencial aumentar la aplicación de los fármacos al reconocer y abordar las razones por las que la gente no ha recibido el inmunógeno hasta ahora, señaló la OMS.