Toluca, Estado de México; 15 de marzo de 2022.-
En medio de una ola de protestas y levantamientos en casi todo Medio Oriente que llegó a conocerse como “primavera árabe”, la guerra civil estalló en Siria hace ya 11 años. El conflicto comenzó el 15 de marzo de 2011, cuando una masiva manifestación sacudió a Damasco, capital de Siria, en el marco de una ola de protestas iniciada en Túnez y Egipto.
En su momento de mayor conflictividad, ha habido cuatro grandes facciones peleando en la guerra civil en Siria:
El régimen sirio – Golpeado por las protestas y luego los levantamientos armados, el Gobierno de Assad llegó a perder el control de gran parte del territorio, atrincherado en Damasco y sus alrededores. Con el tiempo y la ayuda rusa, logró recapturar las principales ciudades en el oeste, sur y centro.
Las fuerzas kurdas – Nucleadas en las milicias YPG, las fuerzas kurdas en el norte de Siria —una zona conocida por los kurdos como Rojava— lograron frenar el avance de en la ciudad de Kobani en 2015, y desde entonces —y con ayuda de EE.UU.— lograron expulsar al grupo y controlan la mayor parte del territorio sirio al este del río Éufrates.
La oposición al régimen – Numerosos grupos de distinta ideología —entre ellos los yihadistas de Jaish al-Fateh—, y muchas veces enfrentados entre sí, llegaron a controlar grandes porciones de territorio en los inicios de la guerra civil. Al momento mantienen un bastión solo en el noroeste de Siria, en la provincia de Idlib, gracias en parte a la participación de Turquía, que además controla zonas desmilitarizadas en la frontera.
ISIS – El grupo surgido en Iraq también llegó a controlar una enorme porción de Siria en su momento de apogeo, con ayuda de combatientes yihadistas extranjeros. Sin embargo, ha perdido casi la totalidad de sus territorios, opera ahora como una célula terrorista, y uno de sus líderes fue abatido en territorio sirio por Estados Unidos en febrero.
Es decir, si bien, actualmente otro conflicto está concentrando la atención del mundo: la invasión rusa de Ucrania, iniciada hace casi tres semanas, el conflicto en Siria permanece latente, con números de muertes civiles y militares inferiores a los registrados años atrás. Pero la guerra civil parece estancada y sin perspectivas de cambio, aunque los diálogos entre Gobierno y oposición continúan, en esta ocasión a través del Comité Constitucional Sirio auspiciado por la ONU.
Entre Ucrania y Siria hay un vínculo concreto: Rusia. En 2015, dos años después del inicio del conflicto en Siria, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, anunció el inicio de operaciones militares en el país en apoyo del presidente de Siria, Bashar al-Assad, y en contra de ISIS.
A partir de ese momento las Fuerzas Armadas de Rusia operaron en el país contra objetivos del ISIS y también de rebeldes contrarios a Assad, concretando su presencia en la región a través de al menos dos bases militares rusas: Hmeymim y Tartus.
Incluso, militares rusos que participan de la invasión de Ucrania cuentan con la experiencia de haber luchado en Siria; de hecho, el lunes pasado, medios estatales de Rusia mostraron imágenes de presuntos voluntarios sirios preparándose para viajar a Ucrania para pelear del lado ruso.
De acuerdo con las últimas estimaciones de la ONU, al menos 350 mil personas han muerto en el conflicto sirio, incluyendo 27 mil 126 niños. Además, hay 6.6 millones de refugiados sirios en el mundo, de los cuales 5.6 millones se encuentran en países cercanos —solo Turquía alberga al 65%—, y 6.7 millones de desplazados internos, según la ONU con datos hasta marzo de 2021.
De acuerdo con UNICEF, justo ayer tres niños murieron por artefactos explosivos sin detonar en la ciudad de Alepo.
Once años después de que comenzara la crisis en Siria, la violencia, el desplazamiento y la falta de acceso a los servicios esenciales continúan obstaculizando la vida de los niños y niñas”, indica el organismo internacional.
De hecho, UNICEF lleva un estimado de cerca de 13 mil el número total de niños muertos y heridos desde el inicio de la crisis en Siria; las minas terrestres, los restos explosivos de guerra y las municiones sin detonar fueron las principales causas de estas bajas infantiles en 2021, también dejando a muchos niños con discapacidades de por vida.
con información de amx noticias