Ciudad de México, 17 may (Prensa Latina) Aunque un paso positivo, hubiera querido que Joe Biden levantara el bloqueo a Cuba violatorio de derechos humanos, medieval, genocida, que nada tiene que ver con la fraternidad, dijo hoy el presidente de México.
El mandatario Andrés Manuel López Obrador respondió así en su conferencia de prensa matutina a una pregunta sobre la suspensión de algunas medidas anunciadas ayer por Biden, aplicadas por Donald Trump para intensificar el bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos contra Cuba.
Es un avance inicial en el camino correcto, expresó, pero son dos cosas distintas respecto a la demanda de que realice una Cumbre de las Américas incluyente, no excluyente como la convocada, aclaró a los periodistas.
Una cosa es esta apertura que debe darse, no una apertura, precisó, sino un paso para que no exista una política de bloqueo que perjudica a mucha gente. Imagínense que los cubanos no puedan comprar alimentos, que la gente no pueda adquirir lo básico porque la empresa que lo haga es sancionada.
Eso es una política genocida, y violatoria de los derechos humanos, repitió, eso no se debe hacer.
Lo otro, lo de la cumbre, es parte también de lo mismo porque niega a un país el derecho soberano de su pueblo a tener la forma de gobierno que desee, y ninguna nación, por poderosa que sea, puede intervenir en sus asuntos internos, afirmó.
Recordó de nuevo la famosa frase de Benito Juárez de que tanto entre los individuos como entre las naciones, el respeto al derecho ajeno es la paz. Es un asunto de principio y vamos a esperar a ver qué sucede, dijo López Obrador.
Explicó al respecto que la de mañana miércoles será una reunión con un senador de Estados Unidos encargado de organizar la cumbre de Los Ángeles, California, el mes que viene.
Vemos bien el emplazamiento de varios gobiernos, como el nuestro, que critican las exclusiones de Cuba, Venezuela y Nicaragua, del encuentro, agregó.
Eso indica a todos que se están tomando en cuenta esos principios afirmó, y reiteró que hasta el momento no ha habido una respuesta negativa, categórica, oficial, del gobierno de Estados Unidos, es decir, no ha dicho no todavía, se ha actuado con prudencia y tolerancia y por eso es importante que nos escuchen.
Han detenido las publicaciones y parece que están esperando, dijo y agregó que faltan unos días para decidir. Nosotros, independientemente de lo que se resuelva, vamos a tener una relación de amistad y respeto con el Gobierno y pueblo de Estados Unidos, ratificó.
Si en este caso de la cumbre no coincidimos no se va a producir una ruptura, de ninguna manera, pero nosotros tenemos que ceñirnos a los principios de nuestra política exterior de no intervención y autodeterminación y, en tal sentido, estamos en contra de excluir a nadie y irrespetar la independencia y soberanía de los pueblos.
No es cualquier cosa esa es la postura de México, pero tampoco significa ruptura, sino simplemente estamos planteando que se invite a todos, que no se excluya a nadie porque nadie tiene el derecho de hacerlo, aunque sea el anfitrión de la fiesta. Quien no quiera ir, es otra cosa, manifestó el presidente.
Yo espero, dijo finalmente, que en estos días se llegue a un acuerdo y que se invite a todos.