En riesgo de apagones eléctricos, seis millones de hogares británicos

Londres, 30 may (Prensa Latina) Seis millones de hogares británicos podrían sufrir apagones eléctricos en el invierno, como parte de un plan ideado por el gobierno para lidiar con un eventual empeoramiento de la crisis energética, informó hoy la prensa británica.


Según el diario The Times, el modelo del peor escenario razonable elaborado por los ministros prevé una escasez significativa de gas en la venidera temporada invernal si Rusia decide recortar aún más sus suministros a la Unión Europea (UE).


El periódico agrega que de cumplirse esas predicciones, el gobierno conservador del primer ministro Boris Johnson, quien a raíz de la operación militar rusa en Ucrania dijo que su país dejará de importar combustibles del gigante euroasiatico rusos para fines de año, se verá obligado a racionar la electricidad a seis millones de viviendas.


Esos apagones eléctricos planificados se aplicarían en los horarios picos de la mañana y la tarde, y podrían durar más de un mes, señaló la publicación, según el cual, el gobierno tendría preparado un plan de contingencia peor para el caso de Rusia corte todos sus suministros de gas a la UE, en respuesta a las sanciones impuestas por Occidente.   

El ministro británico de Negocios, Kwasi Kwarteng, también pidió a las tres últimas centrales termoeléctricas de carbón existentes en el país, y cuyo cierre definitivo estaba planificado para septiembre, que sigan operando más allá de esa fecha.

También se estaría estudiando extender por otros 18 meses la vida útil de la antigua planta nuclear de Hinkley Point B, en el suroeste de Inglaterra, que debe salir del sistema energético nacional en el verano.


En declaraciones este lunes a la prensa local, el viceministro de Cultura, Medios de Comunicación, Tecnología Digital y Deportes, Chrish Philp, aseguró que el gobierno está tomando precauciones para el caso de que se produzca una escasez generalizada de los suministros.


El Reino Unido importa apenas el cuatro por ciento del gas que consume de Rusia, pero los ministros temen que un aumento de la demanda en Europa reduzca a la mitad el flujo que llega desde Noruega, uno de los principales proveedores del país.

También se estaría estudiando extender por otros 18 meses la vida útil de la antigua planta nuclear de Hinkley Point B, en el suroeste de Inglaterra, que debe salir del sistema energético nacional en el verano.


En declaraciones este lunes a la prensa local, el viceministro de Cultura, Medios de Comunicación, Tecnología Digital y Deportes, Chrish Philp, aseguró que el gobierno está tomando precauciones para el caso de que se produzca una escasez generalizada de los suministros.


El Reino Unido importa apenas el cuatro por ciento del gas que consume de Rusia, pero los ministros temen que un aumento de la demanda en Europa reduzca a la mitad el flujo que llega desde Noruega, uno de los principales proveedores del país.