Washington, 30 jul (Prensa Latina) Los bomberos tienen uno de los trabajos más peligrosos del mundo; sin embargo, hoy la causa más común de muerte entre los rescatistas es el cáncer, advirtieron expertos en Estados Unidos.
«Hay muchos tipos de cáncer entre los bomberos», afirmó la doctora Jooyeon Hwang, profesora asociada de Ciencias Ambientales de la Facultad de Salud Pública de UTHealth Houston al referirse al nivel de riesgo que sufren al estar expuestos a agentes cancerígenos en el lugar de trabajo.
Entre la generación más joven de bomberos en comparación con el público en general en los Estados Unidos el cáncer de piel es hasta cinco a seis veces mayor que la población general, dijo la Hwang.
Durante la extinción de incendios hay muchos tipos de humo, señaló al explicar que «cuando el humo es oscuro o gris, muchos carcinógenos o mutágenos (agente químico o físico que tiene la capacidad de cambiar el código genético de manera perjudicial) provienen de los residuos», subrayó.
Según la Administración de Incendios de Estados Unidos, los bomberos tienen un mayor riesgo de desarrollar tumores malignos y fallecer por esa razón que el resto de la población en general, porque también entran en contacto con las sustancias polifluoroalquiladas (PFAS por sus siglas en inglés).
Los PFAS son compuestos químicos que se degradan muy lentamente se han ganado la denominación de ‘sustancia química para siempre’, pues pueden encontrarse en la sangre de los bomberos, en sus equipos e incluso en la espuma.
Datos de la Firefighter Cancer Support Network (activa en Estados Unidos y Canadá), confirman el 66 por ciento de los fallecimientos en acto de servicio de los bomberos profesionales entre el 2002 y el 2019 lo provocó el cáncer.
Esos trabajadores también tienen un nueve por ciento más de riesgo de que se les diagnostique carcinoma y un 14 por ciento más de perder la vida por esa patología clínica que la población general.