Washington, 11 ago (Prensa Latina) Las olas de calor oceánicas y el deshielo de la Antártida serán más comunes y severos al mismo tiempo, reveló hoy una fuente científica.
Según la revista Frontiers in Environmental Science, los expertos tienen suficientes evidencias para llegar a tal conclusión tras estudiar lo eventos extremos en la Antártida y el Océano Austral.
Ellos profundizaron en todo lo relacionado con el clima, el hielo marino, las temperaturas del océano, sistemas de glaciares y plataformas de hielo, además de a biodiversidad en la tierra y el mar.
Consideraron que los entornos de la Antártida bien pueden estar sujetos a estrés y daños considerables en los próximos años y décadas.
Por lo que recomendaron reducir las emisiones de gases de efecto invernadero a cero como la mejor opción para preservar la Antártida.
Los eventos extremos recientes en esta zona geográfica pueden ser la punta del iceberg, de hecho la ola de calor más grande registrada en el mundo de 38,5 grados Celsius ocurrió en la Antártida Oriental en 2022 y, en 2023 la formación de hielo marino en invierno es la más baja registrada.
También es afectada la biodiversidad, por ejemplo las altas temperaturas guardan relación con un menor número de krill, lo que lleva a fallas en la reproducción de los depredadores que dependen de este pequeño crustáceo, parecido al camarón, como lo demuestran muchas crías de lobo marino muertas en las playas.
Los glaciares antárticos se ven afectados por los eventos extremos, por lo tanto, es esencial que se implementen tratados y políticas internacionales para proteger estas regiones, sugieren los investigadores.