Ciudad de Panamá, 10 sep (Prensa Latina) El anuncio de severas medidas migratorias en cuanto al ingreso de visitantes extranjeros a Panamá preocupa hoy al sector turístico.
Las acciones comenzaron el pasado 8 de septiembre, y entre ellas sobresalen demostrar solvencia económica en las entradas formales al país en aeropuertos y fronteras terrestres donde se requerirá declarar que la persona cuenta con al menos mil dólares, en lugar de los 500 dólares anteriores.
También se efectuarán entrevistas en las que evaluarán el perfil de los excursionistas y decidirá si reducir de 90 a 15 días la estadía por turismo, así como se deportará a los ciudadanos con antecedentes penales, según explicó la directora del Servicio Nacional de Migración, Samira Gozaine.
Para Ovidio Díaz, de la Cámara de Turismo de Panamá, esto fue una sorpresa, que preocupa porque es una noticia negativa, ya que, decir que en Panamá ya no tendrás una visa de 60 días, sino de 15 días, eso se convierte en un efecto negativo, y no querrán venir.
En declaraciones al canal de noticias TVN, el experto señaló que esta decisión no fue consultada con el sector, por lo que consideran que entorpece el plan que se tiene con las propias autoridades de promoción del país.
Díaz instó a las autoridades gubernamentales a que las decisiones que se tomen sean consensuadas con los gremios del sector turístico para no seguir afectando la industria.
Por su parte, la Asociación de Residentes y Naturalizado de Panamá (Arena), indicó en un comunicado que consideran que las nuevas medidas traerán como consecuencia la afectación del sector turismo, hotelero y la economía nacional.
En ese texto señalan que se debe tomar en cuenta que Panamá es por excelencia un centro de conexión de la industria del ocio y que debido a esta medida de 15 días y la presentación de mil dólares, muchos turistas podrían elegir otros países que le ofrecen mayor estadía buenas oferta y menor exigencia.
Además indican que la presentación de mil dólares en la llegada a Panamá no cambiará en nada la idea de muchos extranjeros que vienen con intención de quedarse en este país de manera irregular, toman el dinero prestado y llegan a Panamá como un gran turista.
También el Defensor del Pueblo de Panamá, Eduardo Leblanc, cuestionó por discriminatorias las nuevas medidas migratorias anunciadas por el Gobierno.
Acerca de la acción de reducir de 90 a 15 días la estadía por turismo a los viajeros que utilizan vías formales y entran por aeropuertos, a criterio del oficial de migración en las terminales aéreas, el ombudsman señaló que puede ser utilizado con criterios «discriminatorios».
Sobre esa particular medida, Leblanc recordó que ya se han tenido ese tipo de anuncios y lo que sucede es que baja un poco la cifra de migrantes irregulares y a los días vuelve a subir.
Desde la perspectiva de los derechos humanos, consideró además que debe haber una ruta segura y colaborativa, entre los demás países de la región.
Estadísticas oficiales señalan que en lo que va de año han cruzado la selva de Darién rumbo a Estados Unidos unos 352 mil migrantes irregulares, 100 mil más que los que utilizaron esa vía en todo 2022.