Ante las críticas que recibió y la polémica que se creó por trasladarse vía terrestre hacia el Puerto de Acapulco y quedarse atascado en el camino, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que celebra su decisión porque se fue enterando de todo lo que pasaba.
“Ve uno las casas derrumbadas, como todavía el agua inundando la carretera, las avenidas de agua y de lodo, los carros tapados de lodo, afectados por la caída de los árboles, los postes de luz, la solidaridad de la gente.
“Llego a un pueblo y todos estaban preocupados por la desaparición de una familia, de unas niñas; (en cambio) llego en helicóptero, ahí me reúno y tomo el helicóptero y desde arriba”, dijo el mandatario.
Aseveró que no existían las condiciones para trasladarse vía aérea porque estaba completamente cerrado el tránsito para aeronaves y no podía esperar a que se abriera por lo cual tomó la decisión de trasladarse por tierra.
López Obrador aseguró que habló con 500 personas durante su traslado, pero las críticas son opiniones de sus adversarios, “y la verdad no hay que enojarse, hay toda una campaña de desprestigio, pero tenemos un escudo que nos protege, que es la confianza del pueblo en nuestro gobierno”.