Madrid, 30 nov (Prensa Latina) Dejó de ser novedad y ahora el grito de Hey Jude en el Santiago Bernabéu es casi un himno del Real Madrid, hoy entre la admiración y perplejidad por las prestaciones de Bellingham.
Un nombre que sonaba lejano y llamó la atención hace un año en el Mundial de Qatar con Inglaterra. Poco más, hasta que fichó en el verano por el Real Madrid, cuando se marchaba el francés Karim Benzema y no llegaba otro galo, Kylian Mbappé.
Acaba de convertirse en el primer merengue de la historia en marcar goles en sus cuatro partidos iniciales en la Champions League. Ya suma 15 en la temporada y además de anotar contra el Nápoles, sirvió una asistencia a Joselu en el 4-2. Y tiene apenas 20 años de edad.
El inglés fue el MVP del choque que permitió a la «casa blanca» liderar el grupo C con 15 unidades, puntuación perfecta de cara a la siguiente fase de octavos de final.
No sería justo pasar por alto tres detalles. El primero, la labor exquisita en el medio campo del alemán Toni Kroos, el gol del debutante hispano-argentino Nico Paz y otra diana en la racha del brasileño Rodrygo Goes.
Para los cuadros españoles, está virtualmente clasificada la Real Sociedad, que sufrió inesperadamente y logró un empate sin goles con el Salzburgo austriaco en la serie D. Empata en el primer puesto del grupo con el Inter de Milán, ambos con 11 puntos.
Eliminado quedó el Sevilla, que tampoco pudo hacer la cruz contra el PSV neerlandés y cayó 2-3. Un duro golpe para los andaluces que acentúa la crisis del club y de su entrenador, el uruguayo Diego López.
En la semana, el Barcelona y el Atlético de Madrid aseguraron boleto para octavos, ambos de cabezas de sus respectivas series, con victorias ante el Porto y el Feyenoord.
Hey Jude, de nuevo Bellingham, de nuevo Real Madrid
