Las investigaciones por el caso del asesinato de Luis Donaldo Colosio, quien era candidato a la presidencia de la República del PRI para las elecciones de 1994, vuelven a estar en la polémica luego de que este lunes Luis Donaldo Colosio Riojas, alcalde de Monterrey y aspirante al Senado de la República, pidió que se le otorgue el indulto a Mario Aburto, asesino confeso de su padre.
En tanto que la Fiscalía General de la República (FGR) informó sobre las investigaciones que se siguen en contra de un segundo tirador implicado en el caso, identificado como Jorge Antonio “S”, quien ese entonces era agente del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN).
La mañana de este lunes, en entrevista con medios locales, Colosio Riojas declaró que por «compasión» se le debe dar carpetazo al caso Colosio.
«Apelando a la compasión del presidente (Andrés Manuel López Obrador), yo diría que mejor indulte a Mario Aburto, que lo indulte, que ponga un carpetazo final a este asunto, que permita que tanto mi familia como México sanemos, que iniciemos un camino hacia la reconciliación a través del perdón, pero sobre todo a través del respeto, a dejar esto ya en manos de otra justicia, porque la justicia mexicana quedó a deber en su momento y hoy lo que queremos es vuelta a la página y construir algo nuevo», dijo el alcalde de Monterrey.
La declaración del emecista es hecha a unos días de que la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) rechazó el pasado 27 de enero, las declaraciones que hizo el abogado Jesús González Schmal en torno a que Mario Aburto no asesinó al excandidato presidencial del PRI, Luis Donaldo Colosio.
«Es grave, sobre todo, que el señor González Schmal exponga versiones acerca de los hechos ocurridos en Tijuana el 23 de marzo de 1994, cuando es evidente que siendo funcionario de la CNDH, el único acceso que tuvo a la investigación del expediente de queja de Mario Aburto Martínez fue sobre algunos aspectos específicos que se le encomendaron, pero él nunca fue el responsable del mismo», destacó la CNDH en un comunicado.
El caso Colosio volvió a tomar revuelo luego de que en octubre de 2023, un tribunal colegiado federal invalidó la sentencia de 45 años de cárcel en contra de Mario Aburto. Derivado de ello, a Aburto se le tendrá que dictar una nueva sentencia en los próximos tres meses, y podría ser liberado el próximo año, cuando se cumplan tres décadas desde que atacó a Colosio.
FGR informa que hubo un segundo tirador en el caso Colosio
Este lunes, la Fiscalía General de la República (FGR) informó sobre la existencia de un segundo tirador en el homicidio del candidato del PRI a la Presidencia de la República, Luis Donaldo Colosio.
A través de un comunicado, la dependencia acusó que hace 20 días, Jesús Alberto Chávez Hernández, juez Quinto de Distrito de Procesos Penales Federales, «actuó con evidente parcialidad», luego de que rechazó ordenar la aprehensión de Jorge Antonio “S”, agente del CISEN asignado a cubrir al candidato presidencial, quien presuntamente disparó contra Colosio el día que fue asesinado en Lomas Taurinas, Tijuana, el 23 de marzo de 1994.
De acuerdo con la FGR, el juez quebrantó «los principios obligatorios de valoración y análisis del gran acervo de pruebas presentada por la FGR, que implican a Jorge Antonio “S”, agente del CISEN asignado a cubrir al candidato presidencial».
La FGR precisó que Jorge Antonio “S fue liberado en aquellos momentos, «en un evidente encubrimiento delictivo» en el que acusó, estuvo vinculado directamente Genaro García Luna, quien en ese entonces era subdirector Operativo en el propio CISEN.
«Las pruebas presentadas por la FGR en contra de Jorge Antonio ‘S’, demuestran su presencia en el lugar del homicidio, en el mismo momento del crimen, cuando hubo una diferencia de segundos entre ambos disparos. Todas las pruebas aportadas por la FGR, y en especial las de análisis de sangre demuestran que en la ropa de dicho acusado se encontró el tipo de sangre de la víctima», informó la FGR.
«Las pruebas de rodizonato señalan que el acusado, en ese lapso, disparó un arma, y ninguna de las pruebas de descargo lo han podido favorecer. Un gran número de testimoniales señalan al acusado en el lugar de los hechos, al momento de los disparos, del cual huyó; y niegan que él haya ayudado a transportar a la víctima», agregó el comunicado.
La dependencia detalló además que un buen número de testimoniales ratifican la detención de Jorge Antonio “S” cuando traía la ropa manchada con sangre de la víctima; mientras que también se encuentra debidamente probado que el CISEN de la Secretaría de Gobernación mandó al acusado para que estuviera en el lugar de los hechos, para después encubrirlo y sacarlo de Tijuana de manera urgente y subrepticia.
«El video que testimonió el primer disparo, y al cual el juez le pretende dar valor frente a todo el acervo de pruebas aportadas, estaba ubicado hacia el primer tirador y no dirigido hacia el segundo, que se hallaba en un ángulo totalmente distinto, razón por la cual no podía observarse. Y no existe ningún video dirigido hacia el área donde estaba dicho segundo tirador, motivo por el cual esa prueba no puede favorecer, en modo alguno, al responsable de ese segundo disparo», informó la dependencia.
La FGR aseveró además que en el caso Jorge Antonio “S”, el juez llegó el extremo de emitir consideraciones de orden personal en contra del Ejecutivo Federal, lo cual consideró, «es absolutamente inadmisible en un proceso de esta importancia, demostrando así que los delitos de carácter político, al igual que los de grandes despojos patrimoniales vinculados con gobiernos anteriores, se obstaculizan judicialmente para impedir que la justicia los alcance».
La Fiscalía precisó así que a pesar de estos obstáculos para procurar justicia, se irá al procedimiento de apelación ante el Poder Judicial Federal. «En consideración de la trascendencia de un delito de tan alta gravedad, como el que se cometió en contra de la vida del candidato presidencial Luis Donaldo Colosio», informó.
Hasta ahora el único detenido por el caso Colosio es Mario Aburto, quien es señalado de haber disparado dos veces contra el sonorense durante un mitin en Lomas Taurinas, en la ciudad fronteriza de Tijuana, en Baja California. En diciembre de 1995, fue sentenciado a 45 años de prisión.
Actualmente, el michoacano sigue cumpliendo su condena en un penal federal.
En marzo de 2019, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) informó que iniciaría una investigación por presuntos actos de tortura y de obstaculización al acceso a la salud de Aburto Martínez.
Dos años después, en 2021, la Comisión dirigió una recomendación a la Fiscalía General de la República (FGR) y al Órgano Administrativo Desconcentrado Prevención y Readaptación Social, por violaciones graves a los derechos humanos, a la integridad personal y al trato digno hacia Aburto.
En ese mismo año, el presidente Andrés Manuel López Obrador ofreció protección a Mario Aburto si está dispuesto a contar su versión sobre el asesinato del candidato presidencial Luis Donaldo Colosio, cometido en marzo de 1994.
López Obrador aseguró que a su gobierno le interesa que no quede ninguna duda sobre el homicidio de Colosio, quien fue candidato presidencial del PRI en 1994 y tras su muerte fue sustituido por Ernesto Zedillo, a la postre ganador de las elecciones.