Critican a expresidente Aznar por no reconocer errores

Madrid, 11 mar (Prensa Latina) El juez Baltazar Garzón y una fundación española criticaron hoy al expresidente del Gobierno José María Aznar, por no reconocer errores a raíz de los atentados del 11M de 2004.
A propósito de la conmemoración este lunes del vigésimo aniversario de los actos terroristas que terminaron con la vida de 192 personas y cerca de dos mil heridos, Garzón y el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) deploraron la actitud del político conservador del Partido Popular (PP).
Garzón, célebre por haber logrado la detención domiciliaria del dictador chileno Augusto Pinochet en Londres, reprochó a Aznar que aún no haya reconocido que cometió errores y que se «instrumentalizó» el 11-M.
«Fue muy grave la manipulación, la mentira», sentenció.
En tanto, el PSOE acusó al Gobierno de Aznar de cometer «la mayor infamia y la mayor mentira de un gobierno, que antepuso su interés electoral al respeto y a la verdad» con el 11-M y reclamó al PP que pida perdón.
La entonces administración de España insistió en culpar al grupo vasco ETA de la autoría del atentado, cuando desde las más altas esferas estadounidenses se deslizaba la posibilidad de que hubiese sido una célula de Al Qaeda.
Según admitió hoy a TVE el alcalde de Madrid en 2004, Alberto Ruíz Gallardón, a las 9:30 de la mañana, dos horas después de las explosiones, el juez Garzón lo llamó para asegurarle que no había sido ETA.
Durante el 20 aniversario del Día Europeo en recuerdo de las Víctimas del Terrorismo, el presidente del Gobierno Pedro Sánchez recalcó que «nadie puede acostumbrarse a esa violencia
ciega, nadie debe acostumbrarse a convivir con la barbarie».
Señaló la necesidad de recordar por una cuestión de dignidad y defendió que «ese recuerdo debe mantener viva la memoria sobre lo que ocurrió en el pasado, pero también ha de ser un acicate para el presente y para el futuro, para que no se repita, y para que las víctimas, supervivientes y familiares, cuenten siempre con nuestra solidaridad y nuestro
afecto».
El acto, en la Galería de las Colecciones Reales de Madrid, estuvo encabezad por los retes de Espa, Felipe VI y Letizia, el vicepresidente de la Comisión Europea, Margaritis Schinas y de la Comisaria de Asuntos de Interior, Ylva Johansson.
Además, varios ministros, la presidenta del Congreso, Francina Armengol, el titular del Senado, Pedro Rollán, y la ministra del Interior de Bélgica, Annelies Verlinden.
En su discurso, el Rey Felipe ponderó la necesidad de visibilizar a las víctimas del terrorismo, estudiar este fenómeno en las aulas y trasladar los testimonios de quienes han sufrido este flagelo como ‘la mejor pedagogía’ contra la radicalización.
Consideró que para prevenir el terrorismo hacen falta ‘políticas ambiciosas que eviten la radicalización de nuestras sociedades’.
Sus testimonios, apuntó en torno a los sobrevivientes del 11M, ‘tratan de concienciar y hacer ver a los más jóvenes el necesario mensaje de que la violencia nunca, jamás, es la solución’.
Dar visibilidad a las víctimas del terrorismo es una tarea de todos, de las instituciones, de los académicos, de la comunidad educativa, remarcó Su Majestad.
Añadió que las víctimas, ‘nos recuerdan la exigencia colectiva de esta lucha, así como la vileza y el odio sin escrúpulos al que nos enfrentamos’.
El 11 de marzo de 2004, entre las 07:36 y las 07:40 hora local de España, se produjeron 10 explosiones casi simultáneas en cuatro trenes de Madrid. Fueron cuatro los trenes de cercanías siniestrados, en diferentes estaciones, entre ellas la monumental de Atocha.
El Pozo, con 68 fallecidos y tres bombas explotadas, fue la estación más afectada, seguida por la calle Téllez (cuatro artefactos y 64 muertes); Atocha (34) y Santa Eugenia (16). El resto de las personas asesinadas, perdieron la vida en hospitales.