Trabajadores argentinos protestarán contra despidos

Buenos Aires, 28 mar (Prensa Latina) El secretario general de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) de Argentina, Rodolfo Aguiar, confirmó hoy la realización el 3 de abril de una jornada de lucha contra los despidos en la administración pública.
A través de su perfil en la red social X, el dirigente sindical calificó al Gobierno de Javier Milei de «dañino y cruel» y denunció que miles de asalariados están recibiendo telegramas donde se les comunica el fin de sus contratos laborales.
El miércoles nos presentaremos en nuestros puestos de trabajo, haciéndolo (a Milei) exclusivo responsable por cualquier hecho violento, afirmó Aguiar.
Esperamos que no se repitan escenarios del pasado, que la administración pública no esté militarizada y la policía no bloquee las puertas de los ministerios con listados de quiénes pueden o no ingresar, añadió.
Además, acusó al presidente y sus funcionarios de «quebrantar normas fundamentales y violar el derecho constitucional a la estabilidad en el empleo público».
Cada cesantía se convierte en un calvario para el trabajador y la familia que la sufre, pero también detrás de cada puesto de empleo que se pierde, hay una política pública que se desmantela, aseveró.
Frente a la tragedia social que está provocando, nos defenderemos con las herramientas más efectivas que tenemos: ejerciendo nuestros derechos de huelga, manifestación y libertad de expresión, agregó.
Además, señaló que el Ejecutivo es «peligroso y despiadado», por lo que anticipó «el repudio a cualquier hecho de represión que desde la Casa Rosada se pudiera ordenar».
La víspera, el portavoz presidencial Manuel Adorni precisó que se analizan más de 70 mil contratos laborales y 15 mil de ellos serán dados de baja el 31 de este mes.
Asimismo, indicó que el resto continuará siendo auditado.
El vocero afirmó que esos despidos no incluyen a los que tendrán lugar en el Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados y las empresas públicas.
Las entidades de ese tipo son todas pasibles de privatización, cierre o cesión de los empleados, dijo.
Durante las últimas jornadas y horas, numerosos trabajadores se enteraron del fin de sus contratos por mensajes de WhatsApp, por la red social X, correos electrónicos o al intentar ingresar a sus centros y no poder hacerlo.
En un comunicado, ATE condenó «la nefasta práctica de intentar infundir miedo y las políticas de hambre y miseria que aumentan exponencialmente la pobreza y la indigencia».