Quito, 7 abr (Prensa Latina) Artistas, intelectuales y académicos de Ecuador condenaron hoy la invasión a la embajada de México en esta capital, un hecho que irrespetó la soberanía y la inviolabilidad de dicha misión diplomática.
La Red de Intelectuales y Artistas en Defensa de la Humanidad (REDH) expresó su más contundente repudio al allanamiento para consumar el secuestro del asilado diplomático, exvicepresidente ecuatoriano, Jorge Glas.
La REDH insiste en que el acontecimiento contraviene la Convención de Viena y transgrede la Convención sobre Asilo Diplomático, la cual establece la potestad del Estado que otorga el asilo para calificar el estatus de la persona demandante de protección, según su propia comprensión de la persecución.
«Llamamos al gobierno de Daniel Noboa a expresar las más consideradas excusas al gobierno y pueblo mexicanos», señaló la Red que exigió también la liberación de Glas y el cese inmediato de todas las formas de persecución política y actos de «lawfare» que afectan al movimiento Revolución Ciudadana y otros grupos sociales y populares.
Por su parte, la Casa de la Cultura Ecuatoriana (CCE) también repudió el allanamiento a la legación mexicana y llamó a la comunidad internacional a exigir a Ecuador el cumplimiento de las normas internacionales de convivencia.
Pese a la ruptura de relaciones diplomáticas que provocó el hecho, desde la CCE afirman que impulsarán actividades que celebren la riqueza cultural de México y su invaluable aporte al patrimonio mundial.
A su vez, la Cátedra Democrática, movimiento que representa a docentes de la Facultad de Ciencias Sociales y Humanas de la Universidad Central del Ecuador, se sumó al repudio a la actuación del gobierno ecuatoriano al transgredir el derecho internacional y la soberanía de México.
La incursión violenta y armada a la Embajada de México en Ecuador no se justifica en ninguno de los tratados internacionales, específicamente en la Convención de Viena, apuntó la Cátedra en un pronunciamiento que advierte sobre las consecuencias de la ruptura de relaciones diplomáticas.
Esa situación alterará los múltiples lazos sociales, culturales, económicos, fraternos y académicos que se han construido entre las dos naciones desde hace muchos años, señaló el movimiento docente.
Además, subrayó que en el actual contexto de profundización de la precariedad, inseguridad y riesgos que afectan a la población en situación movilidad y que atraviesa a ambos países, el accionar del gobierno ecuatoriano muestra además indolencia con las personas migrantes y la protección y garantías que deben tener en un estado de derechos.
La invasión a la sede diplomática mexicana en Quito, ocurrida en la noche del viernes 5 de abril, suscitó el repudió de la comunidad internacional.
Sin embargo, el Gobierno ecuatoriano insistió este sábado en justificar su accionar y su canciller, Gabriela Sommerfeld, alegó que había riesgo de fuga de Glas, a quien México considera un perseguido político y por eso le otorgó el asilo.