El presidente Andrés Manuel López Obrador reiteró que no darán marcha atrás a la reforma al Poder Judicial, pese a comportamiento de los mercados, con sus declaraciones en torno a que tiene que quedar en septiembre, y ante la propuesta de llevarla a consulta, dijo que lo único que no se pondrá a ninguna consideración es la elección popular de sus integrantes.
“Se puede avanzar si no hay corrupción, por eso están equivocados, lo digo de manera respetuosa, quienes están pensando que vamos a dar marcha atrás al propósito de reformar el Poder Judicial, que está podrido, que está dominado por la corrupción solo proque hay nerviosismo financiero, no”, dijo.
Reiteró que si se limpia el Poder Judicial “en el supuesto de que tengamos desajustes”, con el peso o algunos indicadores, “a mediano o largo plazo eso nos va a ayudar a todos pero además está de por medio la justicia. ¿Cómo vamos a cambiar corrupcion por justicia? ¿Qué les pasa? (…) Por eso lo del Poder Judicial cómo vamos a quedarnos con los brazos cruzados”.
Afirmó que “lo que creo que sí debe sostenerse es que sea el pueblo el que los elija, así no se van a sentir comprometidos, no van a ser empleados de particulares ni de las cúpulas de poder económico. Tendrán como jefe el pueblo”.
Destacó que lo que puede estar a consulta es que se defina la reducción del número de ministros, “otro asunto que es importantísimo y que estaríamos de acuerdo en ver qué se hace con el Consejo de la Judicatura porque debería ser el órgano que vigilará el buen funcionamiento de jueces, magistrados, ministros. Los sueldos, sí se va a cumplir con la constitución”.
También reiteró que le gustó mucho que trabajadores acepten participar en el debate para definir los detalles de esta reforma, “porque no se está excluyendo a nadie nada más que se sometan al escrutinio público, si el juez ha hecho un buen trabajo, la gente lo va a apoyar. Lo mismo un magistrado un ministro, no es como lo hizo Zedillo”.
La fórmula, dijo, “es no permitir la corrupción, no hacer un gobierno ostentoso o al revés, gobernar con austeridad. Es honestidad y austeridad y con eso se dispone de muchísimo dinero para atender las necesidades del pueblo y reactivar la económica, esa es la fórmula”.