Brasilia, 12 ago (Prensa Latina) Más de 93 mil muertes de ancianos fueron registradas por la desnutrición en Brasil, entre 2000 y 2021, según un estudio realizado y publicado hoy por investigadores de universidades federales.
Los estudiosos de los centros superiores de educación del Amazonas (UFAM) y de los Valles del Jequitinhonha y Mucuri precisan que tampoco hubo una reducción significativa en los óbitos entre personas de 80 años o más.
Tal indagación destaca que el aumento de la esperanza de vida, junto con la reducción de las tasas de natalidad, alteró la pirámide etaria global, lo cual impacta significativamente en la salud de la población longeva.
Las enfermedades crónicas no transmisibles (DCNT) son la principal causa de muerte entre los ancianos.
En 2016, el 63,9 por ciento de las defunciones globales ocurrieron en personas mayores, con DCNT como causa principal.
Aunque es una causa evitable, la desnutrición proteico calórica todavía prevalece entre los ancianos.
«Estos resultados son sorprendentes, pues indican una negligencia en relación con un estilo de vida saludable y al cuidado con la salud», explica Ronilson Ferreira, investigador de la UFAM y coautor del estudio.
La mortalidad fue consistentemente mayor entre los hombres, lo que sugiere diferencias significativas en cómo varones y mujeres manejan su salud.
Pese a que las dolencias crónicas relacionadas con la obesidad son actualmente las principales causas de muerte, la desnutrición sigue siendo un grave problema de salud pública.
En 2012, la región sur de Brasil tuvo la menor tasa de mortalidad por desnutrición entre las personas mayores (16,37 por 100 mil habitantes), mientras que la región noreste presentó la mayor tasa (31,80 por 100 mil habitantes).
Las cifras refuerzan la necesidad de estudios a largo plazo para fundamentar políticas públicas de salud que promuevan un envejecimiento saludable, según los investigadores.
A pesar de la reducción en la mortalidad por desnutrición proteico calórica durante los 21 años analizados, las cifras siguen siendo preocupantes.
«La desnutrición sigue siendo un desafío significativo en la salud pública, especialmente entre las personas mayores, que enfrentan mayor vulnerabilidad debido a los cambios fisiológicos, sociales y patológicos asociados con el envejecimiento», señala Ferreira.
Pesquisas revelan que la desnutrición proteico calórica es un fuerte predictor de otras morbilidades y mortalidad, impactando negativamente en la calidad de vida de las personas mayores, aumentando la susceptibilidad a infecciones y otras complicaciones de salud.
Según el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística, Brasil tiene cerca de 32 millones de personas mayores de 60 años, lo que equivale al 15 por ciento de su población, superior a 203 millones de habitantes.