“Corruptelas, no”, subrayó la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, al ratificar que el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales desaparecerá. Ofreció que se revisará la situación de los trabajadores, pero acotó, “una cosa son los que han generado derechos laborales y otra, los de confianza”.
En la mañanera del pueblo, ubicó la decisión del INAI en el anuncio de reducir, por austeridad republicana, cinco por ciento el costo del gobierno -como anunció ayer-, porque esos recursos se van a destinar a programas sociales y obras públicas.
“Lo que ya no va a haber son gastos públicos en los centros nocturnos o en viajes de turismo gubernamental; (tampoco) gastos en tarjetas American Express, pero a la gente siempre se le va a atender” en materia de transparencia.
Afirmó que el INAI no facilita la transparencia a través de la digitalización y sin requerir gastos, como están haciendo ahora, al poner a consulta de ciudadanos las claves de medicamentos.
“La autoridad moral, ética, se gana a lo largo de una vida, no es de una declaración de una persona u otra, en determinado momento”.
Aprovechó para preguntarles a los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación: “¿cómo quieren pasar a la historia, como constitucionalistas o violando la Constitución?”.