Washington, 10 ene (Prensa Latina) Los incendios forestales que arrasan en el sur de California, oeste de Estados Unidos, y provocaron la muerte hasta hoy de al menos siete personas, debían ser un llamado de atención sobre el cambio climático.
Así lo advirtió el periodista estadounidense-canadiense John Vaillant, autor del libro «El tiempo del fuego», en una entrevista concedida al sitio de noticias Democracy Now, en la cual reflexionó sobre los devastadores siniestros que destruyeron miles de estructuras y pusieron también bajo orden de evacuación a más de 130 mil residentes del área de Los Ángeles.
«La lealtad ciega, francamente suicida, a la preeminencia de los combustibles fósiles en nuestro sistema energético está creando una situación cada vez más difícil e inhabitable», señaló.
Estamos en una situación en la que nos estamos dando cuenta, o los residentes de Los Ángeles se están dando cuenta de que el clima realmente es dueño de nuestras comunidades, apuntó al insistir que «es dueño de nuestro paisaje».
El condado de Los Ángeles, la región urbana más poblada del país, ahora está literalmente a merced del fuego y está a merced del clima, subrayó Vaillant.
Explicó que está «desesperadamente seco allí, y los vientos siguen soplando, y los vientos controlan estos incendios».
«Y en el caso del condado de Los Ángeles en este momento, el otro tipo de acelerante secreto es la humedad. Y la humedad se acerca al cero por ciento, lo que es más seco que la leña, más seco que una cerilla. Y ahora hay comunidades enteras que están así de secas, por lo que el fuego tiene que hacer muy poco trabajo para encenderse», agregó.
Hay vientos -dijo- que a veces alcanzan los 80 o 128 kilómetros por hora que avivan las llamas, «no solo las avivan, sino que las convierten en sopletes que soplan a través de estas comunidades. Es una energía devastadora», enfatizó.
Los bomberos no pueden combatirla realmente. Y es por eso que hay un porcentaje tan bajo de contención en estos incendios masivos que ya han causado daños colosales.
Las llamas en Los Ángeles siguen sin contención. Existen al menos cinco incendios forestales activos.
Reportes de la prensa local señalan que el sheriff Robert Luna comparó el escenario como el de «una bomba atómica» que cayó.