Madrid, 5 mar (Prensa Latina) El triunfo es máxima del deporte, aunque en ocasiones una ventaja puede parecer veleidosa, como el caso del Real Madrid, hoy con expectativas moderadas en la Champions League de Fútbol.
Por Fausto Triana
Su victoria anoche 2-1 contra el Atlético de Madrid en el partido de ida de octavos de final del torneo, dejó una sensación ambivalente. De un lado, el técnico Carlo Ancelotti y jugadores como el brasileño Rodrygo Goes, se mostraron contentos con el resultado.
Pero no tanto. Ancelotti dijo a periodistas en el Santiago Bernabeú que el encuentro de vuelta en el estadio Metropolitano, feudo de los colchoneros, será «todavía más duro y más difícil».
Ninguno de los dos equipos queríamos enfrentarnos en octavos; por calidad merecíamos hacerlo en semifinales o en una gran final, pero vamos a dar la batalla, comentó el preparador.
Impresiones similares manifestó Rodrygo, autor del primer gol y MVP del cotejo, a quien se sumó el joven zaguero central Raúl Asencio.
Sin embargo, el tono muy respetuoso respecto al contrincante, a sabiendas que el Metropolitano será una caldera el próximo miércoles 12 de marzo, confirma que, en realidad, hay un tácito reconocimiento al nivel dejo del Atleti.
El golazo del argentino Julián Alvarez y en general un dominio del balón con bastante confianza en buena parte del duelo, hacen pensar que el choque definitorio será de alto voltaje.
Los merengues deberán apostar a una mejoría sustancial de las prestaciones en ataque del francés Kylian Mbappé y el brasileño Vinicius Junior, además de celebrar el regreso a la titularidad del inglés Jude Bellingham, quien cumplió sanción por acumulación de tarjetas amarillas.
Un dilema, de cierto modo, para el entrenador por el excelente rendimiento de Brahím Díaz, quien consiguió el gol del triunfo.
El entrenador argentino Diego Cholo Simeone, se expresó con cierta convicción de que la remontada es factible en el Metropolitano.
Además de la forma óptima de Julián, el movimiento del balón del francés Antoine Griezmann, y el carácter del brasileño Samuel Lino o de más peligro en el área con los revulsivos, el noruego Alexander Sorloth y el argentino Angel Correa, consolidan el proyecto del Atleti.
De momento, como confesó el veterano Luka Modric, con unos 34 minutos de calidad, es mucho mejor dormir con el sabor del éxito. Lo demás, será cuestión de repetir una buena noche de Champions.
Precisamente eso esperan este miércoles los seguidores del Barcelona, que enfrenta al Benfica de Portugal en tierras lusitanas, igualmente en octavos del máximo certamen de clubes de Europa.
Ventaja veleidosa: Real Madrid triunfa con lo justo
