Erick Fernando Álvarez Martínez se perfila al Tribunal de Disciplina Judicial de la Ciudad de México

Erick Fernando Álvarez Martínez, joven abogado promueve el uso de un lenguaje claro, preciso y conciso durante los procesos judiciales con la finalidad que toda la gente entienda la técnica jurídica y no sólo quienes estudiaron la carrera de derecho en el ánimo de generar una mejor conexión de la ciudadanía con el Poder Judicial.

Ante las demandas de los habitantes de la colonia Chinampac de Juárez, en Iztapalapa, precisó la importancia del uso de un lenguaje claro y sencillo, que los demandantes y demandados puedan entender para una mejor comprensión de su causa legal cuando acuden ante los Ministerios Públicos, a los tribunales y/o a los juzgados.

Reveló que una excelente comunicación permitirá modificar la mala percepción de autoridades distantes de la ciudadanía, además de mejorar el trato con mayor empatía, cordialidad y que esto se logrará con capacitación de todos los trabajadores del Poder Judicial.

En ese sentido propuso que los jueces y magistrados acudan a las calles para comprender mejor la problemática social a la que se enfrenta la ciudadanía al coincidir con la premisa de menos escritorio y más territorio porque el contacto con la gente mejora percepciones en todos las actividades sociales y los temas legales no son la excepción, explicó.

Erick Fernando Álvarez Martínez, con el número 23 en la boleta electoral de color rosa manifestó su interés por dejar atrás la percepción de que el abogado y el tema judicial es un sinónimo de corrupción.

Afirmó que existen muy buenos abogados dentro y fuera del Poder Judicial, sin embargo, dijo, tenemos que reconocer que los operadores del Poder Judicial, levantamos una muralla muy grande con la ciudadanía al hablar un lenguaje que sólo nosotros entendemos, hablamos en palabras complicadas, en lexicología jurídica que sólo quienes hemos estudiado una carrera en derecho podemos entender y esa es una primera barrera que nos ponemos o que imponemos a la sociedad, sostuvo.

Insistió en construir puentes de comunicación con la sociedad y que a través del Tribunal de Disciplina tenemos que lograrlo, aseguró.

Este Tribunal de Disciplina Judicial, más allá de ser un Tribunal inquisidor, que castigue a los jueces, tiene que ser proactivo, ayudar a los jueces a comunicarse mejor con la gente, que las resoluciones de lectura fácil no se queden ahí, sino que sean sólo el inicio de una buena conexión y comunicación con las personas.