Washington, 12 ago (PL) Un juez de Estados Unidos falló hoy en contra y calificó de discriminatorio los cacheos públicos que aplican los policías de la ciudad de Nueva York.
La magistrada Shira Scheindlin argumentó que esa práctica -conocida como Stop and Frisk- es inconstitucional, estigmatiza a las personas por el color de la piel y la mayoría de la veces los oficiales exceden su autoridad para ejercerla.
De acuerdo con la jurista, el Departamento de policía de Nueva York continuó con los registros aunque fueron notificados desde 1999 por las sucesivas violaciones de la ley.
Scheindlin agregó que en el 88 por ciento de los casos la policía dejó libre a los sospechosos sin arrestarlos o imponerles multas y nombró a un funcionario federal para supervisar las reformas ordenadas a ese programa.
La jueza respondió así a una demanda colectiva contra el Stop and Frisk presentada a principios de este año por el Centro por los Derechos Constitucionales para poner fin a la discriminación racial en los registros policiales.
Según cifras oficiales, la policía neoyorquina llevó a cabo cinco millones de detenciones y cacheos en la última década.
En 2011, 684 mil 330 personas fueron víctimas de esa práctica y el 87 por ciento de ellas eran latinos y afroamericanos.