Sao Paulo, 30 may (PL) El ministro brasileño de Hacienda, Guido Mantega, afirmó hoy que el crecimiento de la economía nacional estuvo afectado por la disminución del consumo interno, la alta inflación y la escasez del crédito.
«Creo que el consumo de los hogares tuvo malos resultados debido principalmente a la inflación», resaltó Mantega en rueda de prensa en esta urbe, al augurar un segundo trimestre mucho mejor.
El elevado nivel inflacionario pesó en el flojo desempeño de la economía del país en los primeros tres meses de este año, que creció un 0,2 por ciento con respecto al trimestre anterior, subrayo.
Para el titular, el «crédito caro y escaso» contribuyó al descenso del consumo,el cual registró su primer declive desde tercer trimestre de 2011.
Estos factores afectaron asimismo el nivel de inversión en los primeros tres meses del este 2014, enfatizó al recalcar que la demanda crece a un ritmo mucho más rápido y los prestamos reportan intereses más bajos.
El descenso de la inflación y el ascenso de los salarios asegurarán la recuperación del consumo, reiteró
Mantega dijo que hay condiciones suficientes para estimular la inversión en Brasil y otras medidas en este sentido se previeron. «Lo que necesitamos es una recuperación del consumo, que también animará a las continuas inversiones», corroboró.
Al referirse a la Copa Mundial de Fútbol, que comenzará en 13 días, reconoció que esta competencia perjudicará algunos sectores, en especial la industria, pero beneficiará, en cambio, el comercio y los servicios, que representan el 60 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).
«Creo que el Mundial podría perjudicar a la industria porque tenemos menos días de trabajo, pero va a beneficiar el comercio y los servicios», pues tendremos más turistas y mayor consumo de alimentos y bebidas, apuntó.
El ministro evitó hacer predicciones para el resto del año e hizo hincapié en que cualquier nueva previsión se hará durante el próximo período en base a los venideros resultados.
Finalmente, revalidó que hubo revisión hacia arriba del Producto Interno Bruto del año pasado y anunció que este registró un alza del 2,5 por ciento y no del 2,3 por ciento anunciado inicialmente.
Consumo interno brasileño disminuyó por alza inflacionaria
