(N22) El Centro Forense Nacional de Mongolia se ha convertido en el sitio más visitado, ya que alberga la momia de un monje budista encontrada el pasado martes en Ulan Bator, se calcula que tiene más de 200 años.
Budistas comentan que no está muerto y que está en una profunda meditación, porque se conservó en posición de flor de loto durante todo este tiempo.
Barry Kerzin, monje budista y médico del Dali Lama explicó que si el monje sigue con su tránsito de meditación, se podría convertir en el Buda.
El monje budista fue encontrado el martes, envuelto con pieles de cordero. Se halló en la casa de un hombre que pensaba venderlo en el mercado negro.
La mano izquierda de la momia se encuentra abierta y la derecha hace la señal de un símbolo de plegaria llamado “sutra”.
“Sutra es un signo que expresa no estar muerto, sino en una meditación muy profunda”, señaló Ganhugiyn Purevbata, profesor del Instituto de Arte Budista de la Universidad Budista de Ulan Bator.
Sin embargo, monjes budistas afirman que la momia está en la meditación “Tukbam”, que es un trance entre la vida y la muerte.
El servicio forense aún no encuentran razones que expliquen el hecho y siguen sorprendidos por el aspecto del monje: cuerpo delgado con piel gris verdosa y toques marrones, con dedos y orejas definidas, también conservó pelo y bigote.
La agencia de noticias Montsame informó que el monje vivió en el siglo XIX y que investigadores sospechan que se podría tratar del maestro que inspiró al lama tibetano, Dashi-Dorzho Itigilov (1852-1927). Fue enterrado por sus discípulos en mencionada posición.
Autoridades de Mongolia investigaran para poder ligar la familia en la que pertenece, ya que muchas familias se presentaron como supuestos descendientes.