Con motivo del Día de las Madres, que se conmemora este domingo 10 de mayo, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) instó a los Estados parte a no debilitar su legislación en materia de protección al trabajo y la salud, en especial para las madres trabajadoras y sus hijas e hijos.
La OIT advirtió en un comunicado que la mayoría de las muertes maternas e infantiles se pueden prevenir con una protección social adecuada acompañada de “transferencias en efectivo”, para responder a las necesidades de alimentación, vestido y acceso a otros servicios.
Según el organismo internacional, sólo 36 por ciento de las madres trabajadoras en el mundo tienen derecho a prestaciones económicas durante su licencia de maternidad, cuyo tiempo y características varían en cada país.
De un total de 185 países estudiados por la OIT, 98 cumplen con la norma de licencia por maternidad de 14 semanas; 42 cumplen o superan las 18 semanas; 60 conceden una licencia de entre 12 y 13 semanas, y 27 países otorgan menos de 12 semanas.
Si bien 108 países cuentan con programas en materia de atención materno-infantil y políticas laborales durante la maternidad, la mayoría de ellos aplica ineficazmente sus legislaciones, lo que provoca que sólo 28 por ciento de las trabajadoras estén cubiertas antes, durante y después del embarazo.
La OIT alertó que aunque cada día alrededor de 800 mujeres mueren en el mundo por causas relacionadas con el parto y 18 mil niñas y niños mueren diariamente, los ajustes presupuestales de cada país menoscaban la protección social de ambas poblaciones.
MENOS PRESTACIONES
El organismo internacional observó que –a pesar de la muerte materna y la muerte infantil– es una “tendencia” por parte de las naciones disminuir las prestaciones familiares y para las madres como consecuencia de sus políticas fiscales.
En Europa, advirtió la OIT, algunos países han reducido el nivel de las prestaciones de maternidad y para la infancia, mientras que el resto de las naciones de bajos ingresos han reforzado paulatinamente sus leyes en la materia, pero argumentan que los costos de estas prestaciones son “muy altos”.
De acuerdo con dos estudios de la OIT, 57 por ciento de países de ingresos bajos y medios (como Nigeria y Guyana) señalaron que la introducción de una prestación universal supondría una inversión promedio de 0.41 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).
Asimismo, disponer de prestaciones universales por hijas e hijos a cargo representaría un gasto promedio de 1.9 por ciento del PIB.
De acuerdo con la OIT, 74 países conceden prestaciones equivalentes al menos a dos tercios del sueldo, 64 el equivalente a 100 por ciento, y en 93 naciones la licencia de maternidad no es remunerada o se paga una cuantía inferior.
A su vez, 58 por ciento de los países observados concede las prestaciones en efectivo por maternidad mediante el sistema de seguridad social nacional; en 24 por ciento el pago corre a cargo sólo del empleador, y en 16 por ciento se reparte entre ambos.
Fuente: Cimacnoticias