El crudo West Texas Intermediate (WTI), para entregas en octubre, se desplomó hoy 3.79 dólares (7.7 por ciento) y se cotizó en 45.41 dólares por barril, luego de registrar un alza sostenida durante las tres jornadas anteriores.
El comportamiento del petróleo fue afectado por un reporte sobre la contracción de la actividad de la manufactura en China durante agosto, lo que confirmó la percepción de que la economía de ese país, la segunda más grande del mundo, pierde dinamismo.
La caída en el precio del crudo se produjo luego que en las últimas tres sesiones acumuló un incremento de más de 27 por ciento, un repunte que no había sido visto desde la invasión de Irak a Kuwait, en 1990.
Para muchos analistas, la caída de este martes es consistente con el alza histórica de los días previos, debido a que el mercado opera sus propias correcciones y equilibra los posibles excesos.
El retroceso de esta jornada, sin embargo, puso en pausa la expectativa de los productores sobre una eventual recuperación de los precios del petróleo, luego de acumular un desplome de más de 60 por ciento desde 2014.
Ese optimismo fue impulsado por la disminución de las reservas de crudo en Estados Unidos, lo que apunta a un mayor consumo y una menor producción de hidrocarburos en este país.
El sector energético resultó influido además por las declaraciones de miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), que aseguraron que estaban dispuestos a recortar la producción de crudo a fin de impulsar los precios internacionales.