(Agencias) Tras una gran jugada de Rafinha y Messi, Neymar recibió y marcó el segundo para asegurar el título para los culés 2-0 en el Calderón.
Tanto para el Sevilla como para el Barcelona la victoria suponía un broche de oro para una temporada magnífica. En el caso de los azulgrana, lo suman a la Liga ganada hace una semana y si hubiera sido de los andaluces, el doblete sería con su reciente Europa League.
El Sevilla llegó al Vicente Calderón después de haber vivido hace tan solo cuatro días otra vibrante final contra el Liverpool, en la que se proclamó por tercera vez consecutiva campeón de la Europa League, torneo que el miércoles alzó por quinta vez en su historia.
Esto hizo que los sevillistas, que aplazaron la celebración hasta el próximo lunes para preparar su nuevo duelo con el Barcelona, afrontaran con buen ánimo su octava final de Copa.