POR BLAS A. BUENDÍA
blasalejo@yahoo.com
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Ese jocoso slogan en el que se regocija Andrés Manuel López Obrador, que “Morena es honestidad (…)”, viene a desmoronarse porque el presidente del Partido de la Revolución Democrática en la Ciudad de México, Raúl Flores, y el diputado local Iván Texta, denunciaron con documentos en mano que el líder de Morena en la capital Martí Batres, así como el diputado local de dicho partido Alfonso Suárez del Real, han mantenido durante años hasta la actualidad, a infinidad de familiares y amigos en la nómina de la administración pública sin que nunca se hayan presentado a trabajar; «aviadores» entre los que se encuentra la esposa de Batres Guadarrama, Daniela Cordero Arenas.
Y no es de dudarse ya que, por ejemplo, Alfonso Suárez del Real, si bien fungió como subdirector general Jurídico y de Seguridad Institucional del Sistema de Transporte Colectivo Metro (2005-2006) cuando Joel Ortega Cuevas estaba como director del STC, su actual titular el ex priista y ex aliancista Jorge Gaviño Ambriz, y quien a partir del 16 de julio de 2015 ocupó dicha responsabilidad pública, le ha permitido al diputado morenista seguir cobrando más de 250 mil pesos mensuales.
En conferencia de prensa, tanto Flores como Texta señalaron que desde su posición como dirigente de Morena en la Ciudad de México, Martí Batres Guadarrama está haciendo un aprovechamiento ilícito de los recursos públicos de la Ciudad al tener en la nómina de diferentes dependencias a familiares directos que cobran sin trabajar, lo que contradice los tres mandamientos de Morena: «no robar, no mentir y no traicionar al pueblo».
La denuncia de los diputados perredistas se queda corta. Lo peor del caso es que Gaviño tiene en nómina a más de 150 “aviadores” con sueldos mucho muy interesantes; es decir, el que menos cobra se lleva mensualmente y libre de impuestos, 80 mil pesos. No tienen ni siquiera que ir a “trabajar” para no despeinarse, sino su única molestia es formarse en caja para cobrar su cheque sin problema alguno, cada quincena.
Funcionarios de la institución, por cierto, en reciente investigación periodística, revelaron que cuando Joel Ortega Cuevas (2012- 2015) dejó la dirección del Metro -producto de un “golpe de Estado” dirigido desde el escritorio del Jefe de Gobierno Miguel Ángel Mancera Espinosa-, aceptó que su amasia de nombre Tania y a quien tenía como secretaria particular, fuera indemnizada con más de tres millones de pesos para que no le promoviera un juicio de alimentos ya que –se afirma- tiene un vástago con la señora.
Incluso, la indemnización que el Gobierno central mancerista le entregó a Joel Ortega para aceptar dejar la dirección del Metro, fue superior a los ¡siete millones de dólares!, lo que se traduce que las arcas del Gobierno de la Ciudad de México, sistemáticamente son saqueadas con todo lujo aplicando la ilegalidad.
El nepotismo en el Metro es extraordinariamente criminal, incluso fuentes confiables, advierten que el mismo líder sindical, el charro Fernando Espino Arévalo, acepta las brutalidades de Gaviño con quien sostiene un maridaje de complicidades que ha impactado en el mismo desarrollo de mantenimiento del Metro de la Ciudad de México, en tanto que los trabajadores reciben migajas como sueldos cuando aquéllos se dan los mejores lujos.
En el marco de este “ya acostumbrado escándalo de corrupción” en las diferentes áreas partidistas y del propio G-CdMx, el diputado Iván Texta Solís le pidió a Martí Batres “actuar con congruencia y honestidad”, pues mientras por un lado denuncia que se están desviando recursos a través del programa de empleo temporal cuando éste es un programa con reglas establecidas, por el otro extremo, olvida decir que tiene a su esposa Daniela Cordero cobrando desde 2014 hasta la fecha, en la Auditoría Superior de la Ciudad de México, “sin que nunca se le haya visto por ahí”.
“Desde que era Secretario de Desarrollo Social del Gobierno capitalino dio de alta a su esposa, la tuvo aviando durante dos años, los dos que él estuvo ahí, y nunca se presentó a trabajar, y desde 2014, la dio de alta en la Auditoría Superior, en la que por supuesto tampoco se ha presentó a laborar, pero sí existen constancias de que va a cobrar cada quincena su sueldo”, reveló.
El legislador perredista precisó que fue durante la gestión de Martí Batres como Secretario de Desarrollo Social cuando más creció la nómina de la dependencia, (de mil personas al inicio de su gestión a 8 mil personas al término de su cargo), y que al igual que su cónyuge, muchos de sus familiares y amigos ocuparon cargos públicos por los que devengaron un sueldo sin justificar su trabajo, todo con conocimiento y anuencia del actual líder de Morena en la Ciudad.
«El presidente de Morena nos denunció a prácticamente todos los militantes del PRD ante la FEPADE, pero ojalá actuara como nosotros documentando los hechos y no con simples dichos y acusaciones sin sustento, Morena desde que nació se ha caracterizado como el partido de la mentira», sentenció.
Por su parte, Raúl Flores repudió el método de Martí Batres de servirse de las nóminas gubernamentales y legislativas para poder colocar a familiares y amigos que sirven de prestanombres para desviar recursos públicos y no sólo con fines electorales, pues demostró que Martí lleva al cabo práctica de infinidad de irregularidades desde hace años.
El también vicecoordinador del PRD en la ALDF, acusó que el actual diputado local de Morena, Alfonso Suárez del Real, tiene dado de alta como “aviador” en la nómina de la Asamblea Legislativa a Alejandro Sordo Serrano, quien desde el tiempo en que el actual asambleísta fue funcionario del Sistema de Transporte Colectivo, Metro, ocupa una “comisión sindical”.
“Es una relación que Suárez del Real tendrá que explicar. Con el mismo ímpetu que lanza falsas acusaciones hacia perredistas y hacia el gobierno local, le pedimos que explique por qué su chofer y asistente, quien además es comisionado sindical en el Metro con un sueldo, también está en la nómina de la Asamblea Legislativa de la Ciudad de México, cuyas denuncias se pueden constatar en la página del órgano legislativo».
Dijo que estos casos, junto con la denuncia por el desvío de recursos de parte de los cinco Jefes Delegacionales de Morena a la campaña de candidatos a la Asamblea Constituyente, dan muestra fehaciente del mal manejo y desvío de recursos públicos que hace el partido de Andrés Manuel López Obrador que “diariamente quieren hacerse la víctima” y “los buenos de la política”.
Y es que recordó que el PRD tiene acreditados millones de pesos en inversión de publicidad de Morena en el Metro, en bardas, en impresos, en redes sociales y en la logística de los mítines en los que estuvo López Obrador que no se han reportado al INE, sin contar el gasto en estructura electoral que cada partido por obligación tiene que realizar previo la jornada del 5 de junio.
“Si todo el gasto corriente de ese partido lo invirtieron en su campaña, no tendrían un solo peso para pagar gasolina, para pagar el teléfono, para pagar la renta de los locales del partido, no tendría nómina ni para pagar pensiones alimenticias. ¿Entonces de dónde saca el dinero Martí Batres para mantener a sus hijos de tres relaciones anteriores además de los hijos que tiene actualmente? ¿De dónde sacó Morena los recursos para la campaña si no fue de sus delegaciones?», cuestionó el líder perredista.
Raúl Flores dijo también que sería lamentable que unos partidos estuvieran obligados a cumplir con la ley y otros no, por lo que dijo que el caso de los gastos de campaña de Morena es un tema que el INE tiene la obligación de dilucidar lo más pronto posible, a fin de no crear un ambiente adverso e inequitativo a dos días de los comicios.
«Lo que le interesa al PRD es que la elección transcurra en orden, por lo que la autoridad electoral no puede permitir que el proceso sea enturbiado con un comportamiento inequitativo de fiscalización», remató.