Por Blas A. Buendía
El Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México (TSJCDMX) trabaja arduamente para cambiar la justicia, gracias a una transformación estratégica no sólo en la materia penal, dijo el presidente del órgano judicial, magistrado Edgar Elías Azar, quien subrayó que la oralidad requiere la formación de abogados preparados y una colegiación que permita la certificación constante de sus capacidades.
En la firma de un convenio de colaboración con la Universidad Panamericana (UP), enfatizó que es lamentable ver audiencias en las que los justiciables son mal defendidos con alegatos mal planteados, lo que luego genera críticas a la judicatura derivadas de juicios que se pierden por falta de profesionalismo de los abogados.
Con la presencia del rector general de la UP, José Antonio Lozano Díez, el magistrado alertó que no hay instrumentos actualmente para sancionar la falta de ética de abogados, por lo que insistió en la necesidad de establecer la colegiación.
“¿Qué hacemos frente a un abogado que sencillamente no sabe su tema, no está actuando con responsabilidad, no está defendiendo bien a su cliente, no está realizando correctamente los alegatos, no entiende el procedimiento”, planteó Elías Azar.
Agregó que es preocupación del TSJCDMX que las escuelas y facultades estén comprometidas con el tema del cambio judicial que el Tribunal capitalino impulsa, caracterizado por la oralidad y procedimientos novedosos como uno que actualmente se está impulsando en materia hipotecaria.
Si las escuelas, subrayó, no atienden con programas y nuevos cursos, y si no se hermanan con el Tribunal, el cual también debe ser escuela, definitivamente los abogados no van a salir bien formados.
Reconoció, asimismo, que el TSJCDMX enfrenta los desafíos de mejorar los mecanismos para garantizar el acceso a la justicia, el debido proceso y la ética de sus funcionarios, auxiliares de la justicia y abogados litigantes, en un contexto de pluralidad, inclusión y participación ciudadana.
El rector Lozano Díez reconoció que el TSJCDMX es modelo no sólo para el país, sino para América Latina, por su tamaño y la gobernanza que requiere, y destacó la importancia de colaborar y profundizar los vínculos y relaciones con los que ya cuentan.
En el acto participaron consejeros de la Judicatura de la Ciudad de México, magistrados, jueces y funcionarios del TSJCDMX, así como académicos y directivos de la UP.