Londres, 17 sep (PL) La Unión Europea (UE) gastó más de 17 mil millones de euros desde 2014 para evitar la inmigración a sus países miembros, según un informe del Overseas Development Institute (ODI) publicado hoy por la prensa.
Ese coste no ha supuesto la desaparición del problema, sino la apertura de rutas encubiertas por las que llegan miles de personas que huyen de los conflictos en naciones de Asia, África y Oriente Medio; conforme con la investigación del ODI titulada «Refugiados y migrantes de Europa. Flujos ocultos, fronteras más controladas y costes cada vez más altos.»
De acuerdo con el análisis, los Estados miembros gastaron desde 2014 hasta la fecha, al menos mil 700 millones de euros en la implementación de medidas dentro de Europa, en un esfuerzo por reducir el flujo migratorio, si bien se cree que esta cifra solo es una «imagen parcial del verdadero coste».
Entre estas prevenciones resaltan los controles de seguridad en los pasos fronterizos y la construcción de vallas en las lindes por varios países como Hungría (en sus fronteras con Croacia, Serbia y Rumanía), Eslovenia (con Croacia), Austria (con Eslovenia e Italia), Macedonia (con Grecia), Letonia (con Rusia) y Estonia (con Rusia).
A esto se suman los planes de Reino Unido de construir un muro en Calais, Francia, para evitar el paso de inmigrantes a través del canal de la Mancha.
Por otra parte, los países europeos desembolsaron unos 15 mil 300 millones de euros en acuerdos con naciones de origen de los refugiados o los países vecinos, con el fin de apoyar su desarrollo económico, y de esa forma disuadir a sus ciudadanos a emprender una peligrosa travesía hacia Europa.
En cuanto a las vías migratorias alternativas, en 2015 el 35 por ciento de las solicitudes de asilo fueron presentadas por quienes llegaron por otros medios que no son el mar, como ocultos en vehículos para atravesar las fronteras.
Los autores del estudio prevén que el 60 por ciento de los migrantes que llegarán este año a Europa lo harán a través de vías encubiertas.