Ricardo Monreal Ávila convocó al Instituto de Asistencia e Integración Social (IASIS) y al Gobierno de la Ciudad de México para que acompañados de la Comisión de Derechos Humanos local busquen una solución en torno a los 250 puntos de población callejera que -de acuerdo a un censo de estudiantes de la UNAM- existen en la demarcación, debido a que se ha logrado establecer una relación geográfica con la alta comisión de delitos.
“No vamos a criminalizar nunca, ni a la población callejera, ni al sexoservicio, ni al comercio ambulante, pero sí vamos a darle seguridad a los ciudadanos para que no padezcan los estragos de la inseguridad, la anarquía, o el desorden”, dijo el Jefe Delegacional durante la sesión 41 del Gabinete de Seguridad Pública en Cuauhtémoc, en el que reconoció que la desconfianza de la ciudadanía al respecto ha ido en aumento.
“Llegamos al nivel más álgido y de mayor desconfianza de la ciudadanía y no podemos relajar la seguridad pública en los esquemas de justicia, no podemos perder nuestra ciudad”, afirmó.
Aunque algunos pensarían que es imposible superar esa perspectiva ciudadana, dijo que cerrará la brecha de desconfianza, para lo cual pidió a Rafael Luna Alviso, Director General de Seguridad Pública, una estrategia para operar, que conlleve inteligencia, decisión y tolerancia.
La estrategia tiene que ver con el plan de Seguridad Pública y Procuración de Justicia en Cuauhtémoc que ya se tiene preparado para presentar ante la Asamblea Legislativa de la Ciudad de México, el cual tiene que ver con equipar a la policía auxiliar, ubicar cámaras en lugares de mayor incidencia, prevención del delito, equipamiento con vehículos y tecnología. Se trata de un plan austero, dijo, con un costo aproximado a los 200 millones de pesos.
Resaltó que con acciones recientes, como la liberación de comercio ambulante en la Ribera de San Cosme y el desmantelamiento de los campamentos en la Plaza de la Ciudadela, lo que se busca es lograr condiciones propicias para una convivencia equilibrada donde la ciudadanía viva tranquila.
Por su parte, el Director General de Seguridad Pública dijo que el punto de pernocta de La Ciudadela infiltrado por la delincuencia tuvo su fundamento en cientos de quejas ciudadanas por la inseguridad que vivían a todas horas. Agregó que cuentan con tinas de activo incautadas del campamento como pruebas para presentar ante el Ministerio Público.
“Teníamos mucha queja vecinal en San Cosme, de robo a transeúnte… caminaba yo en santa María la Ribera y se quejaban los vecinos de que a diario había asaltos a transeúntes. Logramos reordenar y rescatar y recuperar la zona y en estos días no ha habido ningún incidente, yo espero que en La Ciudadela suceda lo mismo”, apuntó Ricardo Monreal Ávila.