Panamá, 23 feb (PL) La secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), Alicia Bárcena, aseguró que para afrontar la desigualdad que vive hoy Panamá es importante fiscalizar la inflación y apuntalar el empleo.
«El control de la inflación permite a las personas tener mejor acceso a los precios de los alimentos y a los precios en general y, el empleo, es la llave maestra para cerrar las brechas de la desigualdad», sostuvo en entrevista con La Estrella de Panamá, decana de la prensa nacional que mañana arriba a sus 168 años de fundada.
Según la ejecutiva de Naciones Unidas, en la región -y particularmente en Panamá- «hay una intención muy fuerte de aplicar políticas públicas para apuntalar el empleo, al tiempo que la construcción y la ejecución de infraestructuras pueden ayudar a disminuir esa brecha de la desigualdad».
Resaltó que Panamá tiene una de las tasas de desocupación más baja de Centroamérica y el Caribe; sin embargo, expresó su preocupación por la disparidad en el mercado laboral.
«La tasa de participación de las mujeres en Panamá es de 31,1 por ciento y la de los hombres, de 78,6 por ciento, lo que indica que todavía hay brechas muy importantes que cerrar para poder alcanzar una igualdad», acotó.
Bárcena aseguró que la formalización del empleo es algo que deben atender todos los gobiernos, porque de esta manera las personas logran acceder a la seguridad social y tienen un mejor desempeño en el mercado laboral.
Sobre la realidad de los indígenas, donde más del 80 por ciento vive en la pobreza en Panamá, Bárcena dijo que los problemas que más aquejan a esas comunidades son el acceso a la tierra, a los recursos naturales y la comercialización de sus productos.
Para la representante del organismo regional lo más importante es que exista una mayor inclusión social en lo referente al trabajo y los programas de transferencia condicionada, «relevantes para que la población se incorpore y tenga más acceso a la salud y la economía».
Según estimaciones de la Cepal, el crecimiento de América Latina y el Caribe rondará el 1,3 por ciento este año, cifra levemente superior a la alcanzada en 2016 (1,1 por ciento).
En el caso de Panamá, el ente regional estima 5,9 por ciento, en tanto es una economía muy dinámica que en 2017 experimentará una aceleración, subrayó Bárcenas, quien afirmó que ese crecimiento será impulsado por el desarrollo de infraestructuras de inversión.
Hay algunos proyectos del sector de la construcción que pueden contribuir al dinamismo económico del país y otros de infraestructura pública como la línea dos del metro y las de transmisión eléctrica, agua y saneamiento, agregó la secretaria ejecutiva de la Cepal.
Sin embargo, enumeró algunos riesgos como la incertidumbre que avizoran algunos expertos en Estados Unidos con respecto al dinamismo del comercio internacional, lo cual podría afectar a la economía panameña, a lo que se suma el repunte del precio de los energéticos y las tasas de interés.