Marco Antonio Sierra Martínez es el primer empleado de Pemex involucrado en el caso Odebrecht al que la Secretaría de la Función Pública destituye; también lo inhabilitó por 10 años y aplicó una sanción económica de 119 millones de pesos.
Está acusado de pagar un exceso de 119 millones de pesos, la misma cantidad de su multa, a la empresa Constructora Norberto Odebrecht SA, una de las 21 filiales de la empresa brasileña en México.