Washington, 8 abr (PL) Los cerezos que anualmente adornan la capital estadounidense, fundamentalmente el área conocida como Cuenca Tidal, se encuentran hoy en su momento máximo de florecimiento y atraen a miles de personas a disfrutar de este espectáculo primaveral.
El esplendor de estos árboles es el plato fuerte del Festival Nacional de los Cerezos en Flor, un evento que celebra la llegada de esta estación del año, tras los fríos meses de invierno, y honra la amistad entre Estados Unidos y Japón.
De acuerdo con el Servicio Nacional de Parques, se alcanzó el punto máximo de floración el pasado 5 de abril, cuando llegó a su pico el 70 por ciento de los árboles de la variedad Yoshino, la más abundante entre los tres mil 700 ubicados alrededor de la cuenca y áreas cercanas.
La institución precisó que ese estado se observaría a plenitud de cuatro a siete días después del florecimiento, aunque podría prolongarse durante dos semanas.
Inicialmente se previó que las flores brotaran del 27 al 31 de marzo, pero después de que febrero fuera más cálido que lo habitual, el mes siguiente tuvo temperaturas por debajo de su promedio, que retrasaron el proceso.
«Predecir la floración es casi imposible más de diez días antes», recordó en un comunicado el Servicio Nacional de Parques sobre el acontecimiento natural que este domingo mantuvo abarrotadas de los monumentos a Thomas Jefferson, Martin Luther King y Franklin Delano Roosevelt, entre otras zonas próximas a la Cuenca Tidal.
La presencia de los populares cerezos se debe a que en 1912 el entonces alcalde de Tokio, Yukio Ozaki, obsequió más de tres mil de ellos a Washington DC como símbolo de amistad y estrecha relación entre ambos países.
Un primer lote de dos mil de ellos llegó enfermo a Estados Unidos en 1910, pero eso no disuadió a las partes de traer hasta aquí uno de los símbolos más conocidos de la cultura nipona y, con esfuerzos de diversos especialistas, el 27 de marzo de 1912 se plantaron los primeros.
La maravilla visual que constituyen estas plantas y la organización en torno a ellas de un festival que durante varias semanas combina actividades artísticas, deportivas y de entretenimiento convierten este momento del año en uno de los más esperados por los locales y visitantes de otros lugares del país.
Según la página digital del evento, que comenzó el 17 de marzo y se prolongará hasta el domingo venidero, el Festival Nacional de los Cerezos en Flor ha crecido desde un comienzo modesto -en 1927- hasta convertirse en la celebración de la primavera más grande de la nación.
«Hoy abarca cuatro fines de semana y da la bienvenida a más de 1,5 millones de personas para disfrutar de la programación diversa y los árboles», señaló la fuente.