París, 15 abr (PL) El presidente de Francia, Emmanuel Macron, reconoció hoy que la paz no se logra con bombas, pese a lo cual insistió en defender el ataque perpetrado contra Siria, de conjunto con Estados Unidos y Reino Unido.
En entrevista con la televisora BFMTV, el mandatario aceptó que «no se obtiene la paz con bombardeos» y alegó que la agresión perpetrada contra Damasco no constituyó una declaración de guerra.
Pese a que los ataques se realizaron sin el aval del Consejo de Seguridad de la ONU, el jefe de Estado defendió su legitimidad al indicar que tuvieron lugar «en un marco multilateral» y negó que con ello las naciones agresoras asumieran el papel de «gendarmes del mundo».
Washington, Londres y París lanzaron más de 100 misiles contra objetivos en Siria en la noche de viernes a sábado, hecho que de inmediato despertó reacciones de rechazo en el mundo por parte de numerosas personalidades y Estados.
En este sentido, Rusia denunció que se trata de un crimen de guerra, y su presidente Vladimir Putin lo catalogó como una agresión contra un Estado soberano.
En Francia, políticos de diversas tendencias expresaron su oposición a la intervención del país europeo en los golpes aéreos.
«No entiendo la utilidad ni el sentido de golpear por golpear para tener la sensación de haber hecho algo, sin que haya ninguna estrategia detrás», cuestionó el líder conservador Laurent Wauquiez.
De acuerdo con el político, la prioridad de Francia debería ser la lucha contra el terrorismo islamista, y no involucrase en una operación sin sentido.
El líder del movimiento Francia Insumisa, Jean-Luc Melenchon, denunció que «los golpes contra Siria se hicieron sin pruebas, sin mandato de la ONU y contra ella, sin acuerdo europeo y sin el voto del Parlamento francés».
El excandidato presidencial cuestionó que los ataques son «una aventura de venganza norteamericana, una escalada irresponsable».