Si la administración del presidente Donald Trump opta por buscar que el Congreso ratifique un acuerdo que suplante el TLCAN que excluya a Canadá, Estados Unidos inclumplirá con la Ley de Autoridad de Promoción del Comercio (TPA), alertaron expertos comerciales.
La eventualidad de un acuerdo comercial con México requeriría de una nueva ley, y se apartaría de lo que el propio gobierno asentó un año atrás en su carta al Congreso para notificarle su intención de iniciar pláticas para renegociar el TLCAN y donde refirió repetidamente al carácter trilateral del acuerdo.
Michael Kantor, extitular de la oficina de Representación Comercial (USTR) de 1993 a 1996, consideró que el representante comercial, Robert Lighthizer, no estará cumpliendo a cabalidad con la TPA, conocida también como fast track o vía rápida, si presenta un acuerdo bilateral.
“La respuesta es no, por supuesto no, y no debería hacerse”, dijo durante un foro en la institución Centro de Estudios Internacionales Estratégicos (CSIS), donde la también exrepresentante comercial, Carla Hills, hizo eco de esa negativa.
El mes pasado México y Estados Unidos alcanzaron un acuerdo en principio para establecer un nuevo acuerdo comercial, y ahora la administración Trump busca hacer lo mismo con Canadá antes del próximo 30 de septiembre.
Para esa fecha Lighthizer deberá presentar al Congreso el texto final del nuevo acuerdo, ya sea uno bilateral, o trilateral si él y la canciller canadiense, Chrystia Freeland, anuncian que alcanzaron un pacto en los días próximos.
Sería una tragedia sino participa Canadá en el TLCAN
Sin embargo, Trump ha dejado claro que no hará concesiones a Canadá para alcanzar un acuerdo, insistiendo que empujará uno bilateral con México si las negociaciones con su vecino del norte fracasan, algo impensable para Kantor.
“¡Por Dios!, salirse de esto y tener sólo un acuerdo México-Estados Unidos, y no tener a Canadá involucrado, sería una tragedia”, advirtió.
Hill, quien se desempeñó en el cargo en 1989 y 1993, hizo notar los 14 millones de empleos que dependen de las sincronizadas cadenas de abasto a lo largo de las fronteras de los tres socios, como otra razón de peso para mantener al carácter trilateral del nuevo Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
“Si queremos que Estados Unidos continúe teniendo oportunidades económicas, queremos continuar, y actualizar el TLCAN, creando un ejemplo, y tratar, espero, que otros lo sigan”, dijo.
Otros sugirieron que a la administración Trump no le será fácil defender la lógica de reducir las oportunidades para las exportaciones estadunidenses, si opta por dejar fuera a Canadá de un nuevo TLCAN.
“No hay manera de que tú le quieras vender a los rancheros, a los agricultores, (la idea de) tener un acceso ciento por ciento libre de tarifas a todo Norteamérica, y vas a cambiarlo por un acuerdo donde sólo tengas la mitad. Eso no tiene sentido”, dijo Ron Kirk, representante comercial entre 2009 y 2013.