Pese a la captura de Joaquín “El Chapo” Guzmán, el cártel de Sinaloa continúa enviando cantidades “al por mayor” de metanfetamina, marihuana, cocaína, heroína y fentanilo a través de puntos de cruce ubicados a lo largo de la frontera de México con California, Arizona, Nuevo México, y el oeste de Texas revela un informe de la DEA de Estados Unidos.
Las drogas son distribuidas en ciudades como Chicago, Phoenix, Los Ángeles y Denver.
En segundo lugar, la DEA ubica al Cártel Jalisco Nueva Generación, que por cierto lo califica como el más reciente y uno de los más poderosos en México y Estados Unidos.