México, 26 mar (Prensa Latina) El conflicto por la abrogación de la reforma educacional del expresidente Enrique Peña Nieto tomó hoy nuevo impulso con el rechazo de docentes de Oaxaca a una propuesta del gobierno actual.
Los denominados maestros disidentes volvieron a plantarse frente a la Cámara de Diputados pues consideran que las propuestas del gobierno para abrogar la reforma de Nieto y promulgar una nueva, siguen sin cumplir sus demandas e intereses, lo cual refuta el ejecutivo federal.
Las comisiones unidas de Educación Pública y de Puntos Constitucionales de la Cámara de Diputados tenían programado discutir este martes el dictamen de la reforma educativa que, entre otros aspectos, incorpora la demanda de la disidencia magisterial para que los procesos de admisión, promoción y reconocimiento de docentes se rijan por una ley secundaria en la materia.
El proyecto de dictamen fue consensuado por los coordinadores de la oficialista Morena y las bancadas de oposición en la Cámara de Diputados con la Secretaría de Educación Pública, con la clara intención de ser votado y aprobado hoy mismo pese a las marchas anunciadas por la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) que reinició el bloqueo.
Ni los retenes con agentes de lo que fue el cuerpo de granaderos impidieron a los integrantes de la sección 22 de la CNTE cerrar de nuevo los accesos a San Lázaro, como parte de un plan de acción de 72 horas en el marco de la posible aprobación del dictamen para abrogar la reforma educativa.
El grupo disidente demanda que se elimine de la propuesta la regulación de sus condiciones de trabajo, establecidas en el artículo tercero, para que se integren en el artículo 123 constitucional, entre otras demandas.
A pesar de aclaraciones del presidente de la República, y la negociación entre todos los partidos representados en el Congreso, la CNTE rechaza la propuesta de decreto porque -señala- subyace una reforma laboral que perjudica al gremio-, y por tanto demanda su participación activa en la negociación.
Después de esa advertencia, lo que resta es la negociación que alcancen las autoridades federales con ese sector disidente del magisterio para desbloquear la sede de la Cámara de Diputados.