El subsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas, afirmó que México no renunciará a su histórica política de asilo y refugio para los migrantes que buscan una oportunidad distinta de vida.
Reconoció que actualmente se vive una emergencia en esta materia, que reclama la acción firme del Estado, y pidió a las dependencias del sector público federal salir de su “zona de confort” para enfrentar la realidad que vive el país en derechos humanos.