Ginebra, 8 Nov (Prensa Latina) El aumento de la migración climática afecta significativamente el desarrollo global al alterar la infraestructura urbana.
Datos recientes de la OIM indican que los migrantes climáticos forman gran parte de los 64 millones de migrantes forzosos en todo el mundo, y que para 2050 se espera sean entre 25 millones y un billón (mil millones).
Algunos huyen porque sus hogares fueron destruidos por desastres naturales, como ciclones e inundaciones, o porque los cambios en el clima o la degradación ambiental alteraron la agricultura, o bien porque sus ciudades están literalmente hundiéndose.
Para la OIM de mantenerse las actuales temperaturas de calentamiento habrá que hacer frente a los incipientes y significativos cambios en la movilidad humana que ya han comenzado por culpa del clima.
Asimismo, sugiere enfocar la migración ambiental y la inducida por el clima como un área de trabajo independiente, lo que mostrará el complejo nexo entre medioambiente, lo cual requerirá la intervención de más agentes y no solo de los expertos medioambientales.
En tal sentido, se necesitará la colaboración intersectorial y la participación de la industria, la seguridad, la gestión de situaciones catastróficas, el desarrollo urbano, el turismo, la inmigración, la seguridad alimentaria, la ética, la ecología, la salud y la vivienda, considera la OIM.