Por separado, las dirigencias nacionales del PAN y PRD reprocharon la expulsión de la embajadora de México en Bolivia, María Teresa Mercado.
El líder del blanquiazul, Marko Cortés, culpó al Gobierno de López Obrador de la tensión diplomática y sostuvo que la salida de la diplomática es resultado de una política exterior improvisada.
Por su parte, el Sol Azteca pidió al a la administración federal responder de manera recíproca a la expulsión de la embajadora, y apeló al diálogo entre ambos países.