La Paz, 1 mar (Prensa Latina) El binomio de Luis Arce-David Choquehuanca, del Movimiento al Socialismo-Instrumento Político por la Soberanía de los Pueblos (MAS-IPSP) buscan hoy fortalecer su candidatura presidencial con vistas a las elecciones generales en Bolivia, del 3 de mayo.
Arce y Choquehuanca compartirán este domingo con la población de Santa Cruz, a más de 850 kilómetros al suroeste de esta ciudad, como continuidad de su programa Proceso de Cambio y Bolivia merece más.
En su cuenta de Twitter, el candidato del MAS-IPSP a presidente del Estado Plurinacional de Bolivia, convocó a todos los pobladores de los Valles Cruceños a acompañarlos en el acto de campaña en la lucha por el restablecimiento de la democracia en el país.
Del otro lado, la autoproclamada presidenta y candidata Jeanine Áñez efectuó ayer la inauguración de una casa de campaña en El Alto, en medio de incidentes y gritos de ¡Asesinos! ¡Asesinos!.
Según reflejó la publicación Prensa Wiphala, la militarización de la zona no impidió la protesta del pueblo que no olvida las masacres de Senkata y Sacaba.
La fuerza política MAS-IPSP agradeció la solidaridad de varios investigadores y medios internacionales que replicaron la publicación del diario Washington Post, en relación con la hipótesis de fraude elaborada por la Organización de Estados Americanos (OEA) y el secretario Luis Almagro sobre los comicios de octubre pasado.
En ese sentido, el Grupo de Puebla apoyó la petición de la Misión Permanente de México ante la OEA, de solicitar antecedentes para contrastar su informe técnico con el «Análisis sobre la elección de Bolivia en 2019», de los investigadores Jack. R. Williams y John Curiel, del Laboratorio de Ciencias y Datos Electorales del Instituto Tecnológico de Massachusetts.
La investigación de Williams y Curiel concluyó que no existe evidencia estadística de fraude, sino que, además, era altamente esperable que Evo Morales ganase en primera vuelta esas elecciones, dados los escenarios y simulaciones realizadas.
Por su parte, un recuento hecho por el Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (Celag) coincidió en que al menos cuatro organismos internacionales se pronunciaron sobre los hechos de violencia ocurridos en Bolivia después de la renuncia de Morales, el 10 de noviembre último.
Celag alertó sobre la criminación y persecución de figuras políticas y la calificación de masacres a los hechos ocurridos en Senkata y Sacaba, donde en total murieron 19 personas por impacto de bala.