Londres, 11 mar (Prensa Latina) Otras dos personas contagiadas con el nuevo coronavirus COVID-19 fallecieron hoy en Inglaterra, con lo que suman ocho las víctimas mortales causadas por la enfermedad en el Reino Unido.
Al igual que en los seis decesos anteriores, las dos personas fallecidas este miércoles eran de edad avanzada y estaban siendo atendidas por otros padecimientos de salud en el momento en que se infectaron con el virus, reportaron, por separado, fuentes médicas de las ciudades de Dudley y Warwickshire.
Según el más reciente informe de las autoridades de Salud británicas, hasta el momento se contabilizan en el Reino Unido 460 contagios, luego de confirmarse otros 87 casos en las últimas 24 horas.
El país se encuentra todavía en la fase de contención, primera de las cuatro delineadas por el gobierno para enfrentar un brote masivo, y que incluyen las etapas de demora, mitigación e investigación.
No se descarta, sin embargo, que se pase muy pronto a la segunda, que involucra medidas de distanciamiento social como el cierre de escuelas, la cancelación de eventos públicos y el trabajo a distancia, sobre todo después que la Organización Mundial de la Salud declaró al COVID-19 como una pandemia.
El gobierno británico anunció además este miércoles un fuerte estímulo fiscal de 30 mil millones de libras esterlinas (casi 39 mil millones de dólares) para ayudar a la economía local a mitigar el impacto del nuevo coronavirus.
Estamos haciendo todo lo que podemos para mantener a este país, y a nuestra población, saludable y financieramente seguro, aseveró el ministro de Hacienda, Rishi Sunak, al presentar el presupuesto de la nación ante la Cámara de los Comunes del Parlamento.
Según explicó el funcionario, la medida prevé la entrega de cinco mil millones de libras adicionales al sistema nacional de Salud Pública, así como la cobertura de los pagos de salarios por enfermedad, y el apoyo financiero a los empleados autónomos y a las pequeñas y medianas empresas que se resulten afectadas por la epidemia.
El COVID-19 fue identificado en China a finales de diciembre pasado, y desde entonces se ha propagado por más de un centenar de países.
A nivel global se reportan más de 124 mil casos de la enfermedad, y alrededor de cuatro mil 500 muertos, la mayoría de ellos en la nación asiática.