La Comisión de Desarrollo Democrático de Coparmex CDMX exige al Congreso de la Ciudad de México desechar el dictamen de la Iniciativa de Ley que regula el ejercicio del comercio y trabajo no asalariado en la vía pública de esta capital, porque pretende adjudicar el espacio público a los intereses de quienes han controlado el comercio y actividades económicas de forma irregular y en la vía pública; porque es una ley que desincentiva la actividad de la economía formal en la Ciudad y, porque se debe partir de la regulación gradual en materia urbana, de espacio público, fiscal, de salud pública y de seguridad social y no al contrario.
Claudia Guzmán González, titular de comisión empresarial, destacó en rueda de prensa virtual esta mañana la contradicción entre lo que establece la constitución de la CDMX y el dictamen que se encuentra en discusión, ya que, explicó, existe una correspondencia entre lo que es la concepción del Derecho a la Ciudad y la concepción de Espacio Público.
De tal forma, agregó, el proyecto de decreto sobre la ley que regula el ejercicio del comercio y el trabajo no asalariado en la vía pública en la Ciudad de México, presentado por la ciudadana Diana Sánchez Barrios, y la iniciativa ciudadana sobre la Ley de trabajadores no asalariados, prestadores de servicios por cuenta propia y comerciantes en la vía y espacio público, reglamentaria de los artículos 10 apartado B, 12 y 13 apartado C y D de la Constitución Política local, impulsada por la diputada María de Jesús Rosete Sánchez, representan un inminente riesgo para la competitividad, la seguridad pública, el desarrollo urbano y los programas de desarrollo parcial, además de que no contemplan los riesgos de protección civil y los programas de planeación de la Ciudad.
“El espacio público corresponde a una parte fundamental del derecho a la Ciudad, por lo que regularlo y regular las actividades que se pueden o no desarrollar en él afecta directamente el ejercicio de otros derechos”, destacó Guzmán González a nombre del sector empresarial de la CDMX.
Observó que “lo ideal no es generar nuevos espacios en la vía pública para el ejercicio de este tipo de comercio y trabajo no asalariado, sino que se debe únicamente regular el comercio en la vía pública existente y el trabajo no asalariado a partir de políticas encaminadas a la regularización”.
Claudia Guzmán dio a conocer a través de una rueda de prensa virtual la propuesta de la COPARMEX CDMX, que exige:
1.- Establecer un piso parejo en la actividad económica de la Ciudad, evitando leyes desiguales, por un lado con un exceso de regulación como lo es la Ley de Establecimientos Mercantiles frente a esta iniciativa que no promueve, el crecimiento económico de la Ciudad.
2.- Que se considere en esta ley la voz de la ciudadanía, a los pueblos indígenas, originarios y barrios y su relación con el espacio público, promoviendo su participación en la planeación y respetando los programas ya prexistentes de desarrollo parcial, que contemplan el aprovechamiento de los servicios públicos y presupuestos participativos, para la cohesión social y la sana convivencia en los mismos, evitando la violación de los derechos preexistentes de los habitantes de la capital.
3.- Al Congreso local para generar un verdadero debate en las Comisiones del Congreso, y evitar que se contrapongan con otras iniciativas en proceso de dictaminación y, especialmente, que se deseche la discusión de este dictamen pues representa un incentivo a la informalidad y a la construcción de clientelas políticas, porque la figura de asociaciones no es en absoluto un mecanismo de protección de derechos, sino que obedece al control de no asalariados, prestadores de servicios por cuenta propia y comerciantes en la vía pública, a través de la figura de agremiados, pues es través de las asociaciones como pretenden el otorgamiento de los permisos que la autoridad determine y no a los trabajadores de manera directa.
4.- El respeto a leyes ya existentes, así como iniciativas que observen el crecimiento, la competitividad y los empleos formales, a fin de disminuir el crecimiento del comercio hasta ahora informal y el trabajo no asalariado en la vía pública, así como contar con padrones transparentes, registrados fiscalmente, que paguen impuestos y cumplan con todas sus obligaciones fiscales.