Washington, 2 abr (Prensa Latina) La Convención Nacional Demócrata (CND), cuya celebración estaba prevista originalmente para julio en Milwaukee, Wisconsin, será un mes después ante la crisis de salud creada por la Covid-19 en Estados Unidos, informó hoy el diario The Hill.
La principal reunión de la fuerza azul, de donde saldrá el retador del presidente Donald Trump el 3 de noviembre, se llevará a cabo en el mismo lugar durante cuatro días a partir del 17 de agosto, señaló la publicación al recordar que la fecha anterior era del 13 y al 16 de julio.
Todos coinciden en la necesidad del cambio, pues una cita de masas parece cada vez más insostenible en medio de la pandemia del nuevo coronavirus, añadió el reporte.
La víspera algunos líderes demócratas estatales consideraron que tiene sentido el aplazamiento del encuentro si «eso significa que la gente estará más segura».
Otros plantean que están «como volando a ciegas sin saber cuál es el programa. Es el virus el que está determinando nuestro programa».
El favorito precandidato Joe Biden dijo el martes a MSNBC que resulta difícil imaginar que la convención sea como se planeó en un inicio después de lo que ha provocado el nuevo coronavirus en el país.
El exvicemandatario explicó que la CND estaba organizada de manera tal que no compitiera con la cobertura televisiva de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, también aplazados, pero para el verano de 2021.
La Convención Nacional Republicana, en la que se nominará a Trump, está prevista del 24 al 27 de agosto en Charlotte, Carolina del Norte.
Como norma, el partido que no ostenta el poder suele celebrar su convención un mes antes del oficialista. Si se cumple la nueva previsión, entre una y otra reunión solo existirá un lapso inferior a siete días.
Una preocupación de los estrategas es la probable recesión que se avecina, la cual plantea interrogantes sobre la millonaria recaudación de fondos que demanda la convención.
Algunas corporaciones que hicieron compromisos financieros tal vez ya no puedan cumplirlos y las campañas políticas en todo el país se ralentizan. Muchos opinan que saldrán del limbo después de aclarar cuán devastadora será la crisis financiera y sanitaria.