Brasilia, 21 jun (Prensa Latina) Profesionales de la salud protagonizaron hoy una serie de actos simbólicos en todo Brasil para clamar por la vida y rendir homenaje de respeto a pacientes, médicos y personal de enfermería fallecidos por la Covid-19.
También durante los eventos virtuales se repudiaron las declaraciones hostiles del presidente Jair Bolsonaro contra el sector y la irresponsable conducta del Ministerio de Salud ante la calamidad.
Además de ser el segundo país del mundo en número de contagios (un millón 67 mil 579) y muertes (49 mil 976), Brasil registra la mayor cifra de decesos de médicos (139) y enfermeras (190) por la enfermedad, según últimos datos del Sindicato de Médicos de Sao Paulo y el Consejo Federal de Enfermería.
Incluso con las dificultades de acceso a las estadísticas y la probable subnotificación, Brasil es la nación del mundo con mayor mortalidad de trabajadores del sector sanitario por la pandemia.
«Los profesionales de la salud tienen que estar bien, tienen que estar vivos para poder dar una respuesta frente al coronavirus», dijo Rodrigo Diniz, médico de familia de Recife, capital del estado de Pernambuco (nordeste) y activista de la Red Nacional de Médicas y Médicos Populares, citado por el portal Brasil de Fato.
El acto también cuestiona la muerte de miles de personas por la Covid-19, porque se cree que estos óbitos serían evitables.
La convocatoria a la protesta considera que el Gobierno Federal no contribuye a prevenir los casos y, más que eso, tiene una posición genocida.
Diniz explicó que «el acto es organizado por personas del área de la salud, pero si hay otras que quieren sumarse a esta lucha en defensa de los trabajadores y del Sistema Único de Salud, pueden compartir nuestras fotos en las redes sociales».
Llamó a «hacer videos de apoyo a nuestra causa y a tener respaldo en las redes sociales».
En una declaración, las organizaciones puntualizaron las motivaciones de los actos y aclararon que además abogan por la seguridad en el ambiente laboral de los profesionales de la salud y exigen más equipo de protección personal, así como la reorganización de los procesos de trabajo.