Aviones israelíes bombardean franja de Gaza

Ramallah, 27 jun Prensa Latina) Aviones de combate israelíes bombardearon varios sitios de la asediada franja de Gaza, ataques que ocasionaron severos daños a edificaciones de la estrecha banda de tierra donde viven casi dos millones de palestinos, confirmó hoy la agencia Wafa.


Los bombardeos, que causaron incendios y destruyeron varias instalaciones, no dejaron muertos ni lesionados en ese escenario controlado por Israel por aire, mar y tierra, precisó la misma fuente.


Dicha agresión estuvo dirigida fundamentalmente a la ciudad de Deir al Balah, un sitio ubicado en el centro de la franja de Gaza; a la urbe de Khan Yunis -en el sur de ese enclave costero mediterráneo-, y a un punto cercano al Cementerio de los Mártires, (noroeste).


Tales aviones de combate dispararon misiles en otros dos puntos, en casi todos los casos dejando a su paso una estela de destrucción, dijo Wafa.


Según las autoridades israelíes, los ataques fueron una respuesta al lanzamiento de un proyectil desde la franja de Gaza, el cual cayó en un área despoblada.


Las tensiones entre las dos partes han subido de tono con la proximidad de julio, mes que el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, fijó como meta para llevar a vías de hecho el plan dirigido a anexar a ese país partes de Cisjordania.


A partir de ese anuncio la Autoridad Palestina (AP) dejó sin efecto los pactos previos con el gobierno de Tel Aviv, incluidos los acuerdos de Oslo (1993), que incluyen aspectos referidos a seguridad.


Adicionalmente la AP inició una cruzada diplomática en busca de apoyo internacional para frenar las pretensiones del régimen sionista, que calificó de programa de despojo en consonancia con el controversial Acuerdo del Siglo, presentado en enero pasado por el presidente estadounidense, Donald Trump.


En virtud del mismo a los palestinos les sería concedida una autonomía limitada dentro de una patria discontinua, además deja en manos de Tel Aviv el cotizado Valle del Jordán y declara a Jerusalén, reivindicada por los dos lados, como capital indivisible de Israel.


El liderazgo palestino advirtió que de aplicarse la ambicionada anexión, sería completamente inviable el establecimiento de un estado palestino, un derecho reconocido por la Organización de Naciones Unidas (ONU) en sucesivas resoluciones.


Asimismo aseguró que dicha acción destruiría la perspectiva de una salida política al largo conflicto y cualquier horizonte de paz en la región.


A la par de las gestiones para recabar solidaridad, miles de palestinos han protestado en las calles de la franja de Gaza y Cisjordania para rechazar tal proyecto expansionista, en línea con el Acuerdo del Siglo o el plan-Trump, denuncian.


Las manifestaciones no han estado exentas de enfrentamientos con fuerzas israelíes, en su intento por dispersar a los pobladores.


En el transcurso de los últimos meses, han aumentado los altercados violentos entre colonos judíos y aldeanos en defensa de sus tierras.


En Cisjordania viven actualmente, al menos, medio millón de israelíes dentro de asentamientos considerados ilegales y sobre los cuales ese país quiere aplicar de manera oficial su soberanía.

En fecha reciente el ala militar de la facción Hamás declaró que la anexión constituye una declaración de guerra contra el pueblo palestino y que, por tanto, tendría consecuencias.


Mientras dirigentes del Movimiento Nacional de Liberación Al-Fatah afirmaron que podría desatarse una tercera intifada como reacción popular (la primera ocurrió en 1987 y la segunda en 2000).