Atenas, 10 jul (Prensa Latina) La ministra de Cultura de Grecia, Lina Mendoni, criticó hoy el decreto firmado por el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, que convierte el museo de Santa Sofía en una mezquita.
La decisión de convertir la antigua basílica de Santa Sofía de nuevo en mezquita es un desafío abierto a todo el mundo civilizado que reconoce el valor singular de este monumento universal, dijo Mendoni en un comunicado.
Este viernes el presidente Erdogan firmó un decreto que oficializa el cambio de estatuto de Santa Sofía; desde ahora, el templo enclavado en la ciudad de Estambul servirá como espacio de culto para los fieles del islam.
La titular griega declaró que la decisión de las autoridades turcas confirma que en el país euroasiático no existe una justicia independiente, lo que es consecuencia del poder presidencial.
Nadie busca involucrarse en los asuntos internos de Turquía. Sin embargo, Santa Sofía es un monumento de toda la humanidad, independiente de la religión. El nacionalismo por el que se guía el presidente Erdogan es un consejero equivocado que acaba de retrasar al país seis siglos, subrayó Mendoni.
El decreto que convierte a la basílica turca en templo de culto se rubricó al día siguiente de los comentarios de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) sobre graves obstáculos institucionales para el cambio del estatuto de la catedral, de museo a mezquita.
La basílica de Santa Sofía fue fundada por el emperador cristiano Justiniano y se inauguró el 27 de diciembre de 537.
Durante más de mil años fue el templo más grande de la Cristiandad, pero, después de la toma de Constantinopla por los otomanos y la caída del Imperio bizantino en 1453, la basílica se convirtió en una mezquita.
En 1934, el fundador del Estado turco moderno, Kemal Ataturk, convirtió el edificio en un museo; el templo fue incluido en la Lista de Patrimonio Mundial de la Unesco.